Este libro cierra la trilogía de Levi: 1-Si esto es un hombre. 2- La tregua. "De cualquier manera que termine esta guerra, la guerra contra vosotros la hemos ganado; ninguno de vosotros quedará para contarlo, pero incluso si alguno lograra escapar el mundo no lo creería. Tal vez haya sospechas, discusiones, investigaciones de los historiadores, pero no podrá haber ninguna certidumbre, porque con vosotros serán destruidas las pruebas. La gente dirá que los hechos que contáis son demasiado monstruosos para ser creídos; dirá que son exageraciones de la propaganda aliada, y nos creerá a nosotros, que lo negaremos todo..." Estas fueron palabras dichas por los soldados de las SS. El autor, luego de pasarse años de dar conferencias, responder cartas, leer, coincidir, rechazar, culmina la trilogía desdoblando los mecanismos psicológicos (terribles y tremendos) de los campos de concentración. Me sigue gustando por el "distanciamiento", Levi jamás es "víctima" en sus libros, logra ser "espectador" para trasmitir su experiencia como superviviente y desde un estilo analítico. Siendo la piedad, su llamado como "prima categoría de la condición humana" y haciendo una fotografía con palabras, sacando a la luz una vez más, las crueldades y opinando sobre la responsabilidad, la complicidad y el olvido del pueblo alemán. Un ensayo sobre la comprensión del hombre y sus límites. La división entre víctimas y verdugos, inocentes y culpables, es para Levi una simplificación que no hace justicia a una realidad más compleja. Entre ambos opuestos existió una" zona gris" de indefinición moral, difícil a veces hasta de juzgar sino se tiene la noción real de las atrocidades que pasaron. Siento como el autor relata, mira, recuerda, intentando no juzgar a quienes pasaron la raya y asumieron papel de víctima-verdugo porque las circunstancias le obligaron (obligaron?). Los rechaza (es claro) pero les intenta entender, aún cuando jamás él participó de alguna condición dual de este tipo. Léase aquí, a prisioneros; oficiales y soldados, tienen otro tratamiento, basado en aquel absurdo mandato de que los militares "obedecen", alegato más que gastado en los juicios de Núremberg. La pérdida de la dignidad, que hizo incluso que muchos sobrevivientes hasta le avergonzara salir con vida, es otro de los análisis escalofriantes de este texto. La maquinaria Nazi fue experta en llevar al ser humano a la más degradante condición animal y Levi desmenuza este análisis, subjetivo, pero certero. Un llamado a NO OLVIDAR. Y no deberíamos! Estos deberían ser textos en las escuelas, para honrar la memoria del autor que siempre temió la posibilidad de la repetición y como muestra real de hasta donde puede llegar la maldad humana, en nombre de infinidades de excusas. + Leer más |
«Sabéis, niños, cuando tenía vuestra edad, me encantaban los números... Pero no podía imaginar que tendría que llevar uno en el brazo toda la vida».
Pocos meses antes de su muerte, Primo Levi conoce a los alumnos de la escuela primaria de Rignon en Turín, la misma a la que él asistió cuando era niño. de la mano del escritor, los niños aprenderán qué fue el Holocausto, y conocerán la experiencia en primera persona de uno de los supervivientes del infierno de Auschwitz, una de las páginas más oscuras de la historia del siglo XX.
El cómic viene complementado por una detallada cronología sobre la vida de Primo Levi, y por una descripción ampliada de los personajes más significativos de su historia.