Pico Chico

Este entrañable libro para pequeños lectores nos cuenta la historia de un pájaro muy pequeño que vive sobre un hipopótamo. Es tan enorme que no necesita nada más. Sin embargo, un día descubre un sonido que le hace marcharse a descubrir el mundo que lo rodea.

La historia comienza contándonos la extraña amistad entre un pequeño pájaro y un hipopótamo, este le proporciona un hogar al pequeño y a cambio el pajarito se come todos los parásitos que crecen en sus heridas.

Todo funciona bien hasta que tienen un pequeño enfado. Este enfado es una gran metáfora de la vida y, especialmente, de la vida de los más pequeños. Es bastante común que dos niños sean muy amigos, sin embargo, cuando se añaden más niños al juego, la actitud de ambos cambia y su amistad puede dejar de ser la prioridad.

Y esto hará que el pájaro se marche buscando ese precioso sonido que no para de escuchar y que le llama la atención tanto como lo hacía el canto de las sirenas a Ulises.

Es un libro que nos transmite bastantes ideas positivas y valores: el ser uno mismo, en no cambiar tu forma de actuar por los demás, la necesidad de encajar en el mundo, la búsqueda de la propia identidad...

Además, pedagógicamente también nos enseña los diferentes verbos que denominan el sonido de los diferentes animales: gruñir, croar, silbar, zumbar... ampliando así el conocimiento del mundo de los más pequeños.

Teóricamente es un libro a partir de 4 años pero he preferido calificarlo como primeros lectores pues, aunque sus hojas son muy finitas, el libro puede ser muy atractivo para los más pequeños (únicamente necesitarán la ayuda de un adulto para poder pasar las páginas y leer la historia).

También me ha gustado mucho la reflexión que hay en la contraportada: "Las lenguas pequeñas hacen el mundo más grande". Pues considero que podemos partir de este libro para que los niños valoren de un modo especial no solo los idiomas de nuestro país sino también los pequeños dialectos que hay en su zona. Esas palabras típicas de su ciudad o su pueblo que, si no hacemos nada, poco a poco se irán perdiendo y con ello también la riqueza cultural de nuestros pequeños. Así, esta historia puede servir para que los niños se sientan identificados con Pico Chico y valoren también sus propias palabras, acentos, costumbres, expresiones culturales...

Algo curioso a destacar son las ilustraciones, pues, aunque parecen sencillitas están repletas de detalles y guiños de lo más interesantes. de hecho, ha sido cuando lo he mirado más de una vez cuando me he dado cuenta de las curiosidades que aparecen en gran cuerpo del hipopótamo.

En conclusión, Pico Chico es un libro muy adecuado para los más pequeños, pues tiene una historia muy tierna con un montón de reflexiones interesantes detrás que harán las delicias de los más pequeños.
Enlace: https://perdidaentreunmardel..

Pico Chico es un pequeño pájaro que vive en el lomo de un hipopótamo donde encuentra todo lo que necesita para vivir sin necesidad de volar ni de relacionarse con otros pájaros como él. Es tan feliz con su amigo, al que considera su «territorio con patas», que aprende a gruñir como él porque piensa que es algo natural. Sin embargo, esto provoca las risas y burlas del resto de los hipopótamos.



Y así Pico Chico

aprendió a gruñir como el hipopótamo.

Gruñía a la jirafa, gruñía a la cebra, gruñía al buey, al ciervo

y a todos los demás animales. Pensaba que, gruñido a gruñido,

se haría tan temible y poderoso como el gran hipopótamo.



Todo cambia el día que Pico Chico escucha un bello canto que es el detonante de su búsqueda de la felicidad. A partir de ese momento, el pajarito se abandona su zona de confort y emprende un viaje de autoconocimiento por todo el mundo donde descubrirá el origen de ese canto que no se parece en nada a lo que conocía hasta ahora y que le mostrará sus propias raíces que desconocía hasta ahora. ¿Quién es el autor de ese sonido al que es incapaz de resistirse y por el cual se atreve a sacrificarlo todo? El final es sorprendente y el viaje no es más que una metáfora del crecimiento y de la apropiación de la identidad y la confianza en uno mismo. Pese a la aceptación y la comodidad de lo conocido, es necesario apostar y experimentar por nosotros mismos porque antes de pensar en la integración es más importante saber quiénes somos, nuestro pasado.



Y, sin pensárselo dos veces, con una fuerza que hasta

entonces no sabía que tenía, sacudió sus alas y voló

por el aire en busca de aquel canto hermoso y lejano.

Una historia entrañable con muchos valores positivos y significados implícitos. Las ilustraciones son muy representativas y suelen tener el fondo azul claro como el lago y el color de la piel del hipopótamo. Sin embargo, el color cambia debido al viaje del pájaro y se torna del color de la noche (cuando abandona lo que consideraba su hogar) y del cielo (al emprender el vuelo). Además, el hipopótamo representa el territorio a veces como todo un continente y otras como un pedazo de bosque. Como también todo un planeta que marco el paso de los días por la luz que refleja del sol. Otro recurso es aprender la voz de los diferentes animales: gruñir, croar, silbar, piar, etc.



A destacar la frase de la contraportada que invita a la reflexión alrededor de todas las lenguas y dialectos del mundo que por minoritarias o minorizadas implican todo un legado de sabiduría, historia, costumbres y cultura que no debemos olvidar: Las lenguas pequeñas hacen el mundo más grande. Una historia muy completa y profunda con muchos matices que con cada nueva lectura se irá ampliando toda la riqueza que aporta para los pequeños lectores con el acompañamiento de un adulto que disfrutará por igual de todo el contenido y significado.


Enlace: https://literatil.com/2019/1..

Pico chico nos cuenta la historia de un pájaro que vive encima de un hipopótamo. En él, Pico chico se siente seguro y cree que ya no necesita nada más.
Un día Pipo chico y el hipopótamo se enfadan y gracias a ello, Pipo chico descubre que hay un mundo por descubrir y sobre todo, que tiene que descubrirse a él también y no vivir a través de su amigo.
La historia en sí está llena de ternura. Pipo chico es un personaje que al menos a mi hijo, le ha hecho mucha gracia. Además, quitando que la historia resulta divertida y curiosa para los niños, está llena de mensajes positivos que los más adultos conseguimos captar.
Yo me quedo con una y es que por mucho que refugiarte en otros te haga sentir seguro, hay que lanzarse y ser uno mismo.
En definitiva, en esta casa ha triunfado Pico Chico y es uno de los cuentos que más se leen antes de ir a dormir.