Las ruinas de Liencarel nos presenta una visión de los ángeles distinta a la que conocemos. Estos no son ángeles bondadosos, ni tienen alas ni ayudan a la humanidad. Son una raza que se distingue y poseen dones. Viven aislados del mundo desde que un suceso los marcó. La protagonista descubrirá que forma parte de esta raza de la que no sabe nada y junto a ella iremos descubriendo todos los misterios de este mundo y de su propia existencia. Es una novela juvenil con los toques típicos del género fantástico que resulta bastante amena y fácil de leer. Quizás peque de ser algo introductorio pero tiene una narración tan sencilla que te permite meterte con facilidad en la trama y no aburrirte. |