Los hombres que no amaban a las mujeres

Pura novela negra y policíaca me atrapo sin ningún tipo de dudas desde el principio.

Con Mikael Blomkvist y Lisbeth Salander como protagonistas nos sumergimos en una intrincada pero muy adictiva historia. Todo comienza con Mikael sentenciado por difamación a un empresario y relegado a un segundo plano en su revista Millennium. Entonces entra en escena Henrik Vanger quien le pide que bajo la tapadera de hacer una biografía de la familia Vanger investigue la desaparición hace años de su sobrina Harriet. Aunque al comienzo Mikael no quiere aceptar, cuando Henrik le dice que tiene información que le puede resultar útil contra el empresario que ‘difamo', acepta. Ya en Hedestad (el pueblo, por decirlo de algún modo, de la familia Vanger), Mikael irá conociendo a todos los miembros de la familia e involucrándose mucho en la resolución de la desaparición de Harriet. Para rematar las cosas, en la familia Vanger nada es de color de rosa ni mucho menos. Entre sus miembros hay muchas disputas, peleas y secretos. Descubrir el pasado de los miembros de esta familia es muy interesante y sorprendente y algunas veces (por no decir siempre) me quedaba con la boca abierta. Pero Mikael no estará solo en la investigación, sino que contará con la ayuda de Lisbeth Salander, una chica especial y muy peculiar.

Aunque haya muchos personajes, todos están bien diferenciados, definidos y tienen un pasado por descubrir. Quien más y quien menos tiene algún secreto. Intentando resolver la desaparición de Harriet, descubrirán muchos secretos ocultos, varios crímenes y criminales. Nadie se salvará. El más horrible de estos criminales aún esta suelto y cometiendo crímenes impunemente y descubrir quien era me dejo alucinada.

La historia es compleja, por mezclar muchas historias y contar con tantos personajes, pero es fácil de seguir y se va desenredando poco a poco. Cuentan mucho los detalles, que a simple vista parecen sin importancia pero que a veces son muy claves. Las apariencias engañan mucho en este libro y quien menos te esperas te sorprende.

La relación entre Lisbeth y Mikael es única y muy particular y sinceramente, me gustó mucho.

Dejando de lado la historia de la familia Vanger; desde el comienzo hasta la mitad (más o menos), que es cuando Lisbeth va ayudar a Mikael, vemos la vida de Lisbeth alternada con lo que le pasa a Mikael. Su historia es muy interesante y nos permite ver como es ella. Y no tiene una vida fácil, como bien se ve en el libro.

El final es una genialidad, lleno de acción y descubrimientos. Las historias principales se cierran y no queda ningún cabo suelto. En general, es una historia llena de acontecimientos, con mucha acción y muchísimo misterio que hace que no puedas dejar de leer ni un solo segundo y que quieras saber más y más.

El autor escribe de manera muy fluida, como si fuera lo más fácil del mundo y sabe resolver las situaciones con realismo y sin dejarse nada en el tintero.

En cuanto a personajes, todos son muy interesantes y están genialmente construidos.

Mikael es un protagonista muy bueno. Aunque haya actitudes suyas que no me gusten y a veces piense que actúa mal, me encanta su perseverancia y su a veces lucha interna sobre lo que hacer. No se rinde ni cuando está en peligro su vida y eso dice mucho de el. le gusta acabar lo que empieza y no dejarlo a medias. Se nos presenta como un rompe corazones que mantiene una extraña relación con Erika Berger (compañera suya en la revista) y con Lisbeth.

Lisbeth es un personaje único, no se parece a nada de lo que he leído hasta ahora. Con un pasado turbulento, es callada y pasa desapercibida. Tiene mucho genio y carácter y no se amedrenta ante nada ni nadie. Tiene más pelotas que muchos hombres y sabe cuidar de si misma. La tachan de desequilibrada mental pero nada más lejos de la realidad. Es muy inteligente (por algo es de las mejores hackers), observadora y tiene una memoria fotográfica privilegiada. Nunca muestra sus sentimientos y suele ser fría. Esto tan solo es una coraza que se ha creado para protegerse después de la mierda de vida que le ha tocado vivir.