Los hombres que no amaban a las mujeres

Ha sido una novela compleja, densa, pero a la vez muy adictiva, tiene muchos detalles enredados en la trama, personajes que aparecen y desaparecen, cuya importancia parece dar pistas al lector, pero que los protagonistas desechan, historias del pasado que son arrancadas hacia el presente, secretos y un millar de aspectos que parecen ser reales y resultan no serlo.

El inicio es denso, muy denso y aburrido, se sucede entre periodismo económico, historias que parece que no aportan mucho y una sucesión de dramas empresariales que, incluso estando especializada en la materia, se me hacía muy cuesta arriba. En el momento que empieza la investigación todo adquiere tintes más diferenciados, más atractivos, de esos que te hacen querer seguir descubriendo más detalles y llegar a su desenlace, pero no es sencillo. La investigación avanza muy lentamente, pero sin que ello provoque aburrimiento de nuevo, porque se conocen nuevos personajes, algunos se intercalan como un suspiro y otros se quedan con mayor importancia, aportando nuevos detalles o desmoronando las posibles pistas adquiridas.

Mikael es un personaje muy interesante, es muy sencillo y tiene una personalidad bastante "plana", es decir, tiene entresijos, tiene sus propios dramas, pero no destaca tanto como podría hacerlo otro, pasa más a un segundo plano, pero a pesar de ello, se nota su relevancia. Caso contrario es la maravillosa Lisbeth Salander, me parece una reina, con su personalidad arrolladora y sus habilidades de hacker para entrar en cualquier sitio aunque esté prohibido, sin que la noten, solo siendo una pasada de personaje. La pena es que considero que sale un poco más tarde de lo que me habría gustado, el autor nos regala escenas sueltas a lo largo de la primera mitad y, no es hasta la segunda mitad, cuando empieza a acaparar mucho más protagonismo, como se merece.

La historia trata temas muy duros y lo hace sin florituras ni adornos, directo y al grano, donde más duele: desigualdad de género, el acoso y las violaciones; algunas escenas son tan crueles y duras que realmente es complicado de leer.

Se trata de una primera entrega cargada de intriga, de sospechas y de tensión, también tiene partes densas, partes aburridas y de ese estilo que parece que las páginas se echan encima, pero hay que tener en cuenta que es un libro que va de menos a más, va ganando terreno, va ganando enganche y finalmente crea un thriller trepidante y muy adictivo.