Nos encontramos en Viena en la actualidad, donde Ellinor tras descubrir que su abuela era adoptada, se adentrará en un viaje para conocer sus orígenes. La trama se sitúa a principios del siglo XX y tiene varias líneas temporales bien diferenciadas. Por un lado conocemos a Liliana, luego a Clara gracias a su diario y luego nos adentramos en la historia de Alison. Todas ellas con un nexo común: Frano Zima, el bisabuelo de Ellinor. Poco a poco nuestra protagonista ira encajando todas las piezas del puzzle para descubrir la historia de sus antepasados, pero también se conocerá a ella misma y tomará algunas decisiones para cambiar su propia vida. Es un libro muy ameno y aunque en algunos momentos es predecible es una historia que se lee muy bien y te deja buen sabor de boca. Me gustan mucho las historias de este tipo donde se vuelve al pasado para conocer algún secreto y las protagonistas se embarcan en un viaje. |