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“Los nombres pueden perderse u olvidarse. Nadie lo sabía mejor que Lazlo Strange". Lazlo, nuestro protagonista, es un niño abandonado al nacer en el reino de Zosma. Ciertamente fue un bebé algo extraño para los monjes de la abadía de Zemonan quienes lo acogieron, pues jamás lloró. Un día, ya con cinco años cumplidos, estaba jugando con sus amigos imaginarios a ser un guerrero tizerkán y de pronto *zaz* olvida el nombre de la ciudad de la ciudad prohibida, logrando que de su boca salga solo el nombre Weep. Pero él está seguro de que ese no es el nombre de la ciudad, él considera que alguien ha eliminado con magia el verdadero nombre de la ciudad que ahora se llama Weep. La ciudad oculta -Weep-, es un lugar donde lo imposible no existe; como es el caso de que sus alquimistas pueden hacer oro en tan poco tiempo. Tienen la mejor infraestructura del mundo y la biblioteca más maravillosa que se podría conocer jamás. Muchos aventureros quisieron llegar a la ciudad, pero una vez se iban en su busca, no regresaban. La ciudad estaba prohibida para los faranji, tal como los nativos de Weep solían llamar a los foráneos. Siendo ya un hombre, a Lazlo se le encomienda entregar unos manuscritos a la Gran Biblioteca de Zosma, y allí es donde decide quedarse, pues es un lugar lleno de historias de todo el mundo. Aprende el oficio de bibliotecario a sus trece años, y su mayor apoyo fue el maestro Hyrrokkin. Una vez en la Gran Biblioteca, su obsesión por conocer más de Weep crece, y siempre que tiene oportunidad investiga y lee un poco más de la ciudad. Pero este solo es el pequeño inicio de su propia historia. Un día cualquiera, y en el que Lazlo menos esperaba, su sueño comienza a materializarse con la llegada del matadioses, Eril-fane. Aunque al principio fue algo complicado para él poder presentarse ante el matadioses, Lazlo lleno de valentía lo consigue, por supuesto. Ya en la ciudad Oculta, cuando Lazlo está durmiendo, sueña. Sigue soñando con su imaginación la Ciudad de Weep y allí ve por primera vez a Sarai. Una chica azul y musa de las pesadillas. Sin embargo, él no sabe quién es ella realmente, pero la ve y cree que es Isagol. La ve y está encantado. La ve y quiere seguir viéndola. ¡Oh Dios mío! Es aquí donde debo admitir que me ha costado mucho poder realizar esta crítica, ¿por qué? Sencillo. No tengo las palabras que le puedan hacer justicia a esta obra tan maravillosa. Así que intentaré escribirles mi opinión lo mejor posible. Para iniciar, no se imaginan la montaña rusa de sentimientos en la que estuve con este libro. Sufrí, reí, volví a reír y volví a sufrir, me alegré y quise coger a algunos personajes a gritos. ¡En fin! Sí que me he disfrutado la lectura de la primera entrega de esta bilogía de principio a fin. Es la segunda historia que leo de la escritora Laini Taylor y sigo encantada con la forma en que nos puede presentar un mundo que se haga sentir real. La manera en que caracteriza a cada uno de los personajes es simplemente increíble. ¿Por qué lo digo? Porque son personajes dentro de historias complicadas de desarrollar, pero que ella nos lo hace ver de una forma tan sencilla y sutil que la lectura nos atrapa tanto hasta el punto que no sentimos que hemos llegado al final de ella, sino es cuando ya estamos en las últimas páginas. Este world building que nos presenta Taylor de un mundo con dioses de colores y poderes fascinantes, alquimistas capaces de mil y una maravillas, y humanos capaces de matar a dioses malvados, es muy creativo y denota lo bien desarrollado que está. Convirtiéndola en una autora comprometida con sus historias. Ahora bien, hablando un poco más de los personajes. Lazlo es uno muy cautivador y alentador. Con él te das cuenta que la verdadera belleza no es el recipiente en el que se encuentra nuestra alma, sino el espíritu que corre por nuestras venas. Si te das una oportunidad de conocerlo, créeme que vas a vivir cada una de sus vivencias. Sarai, la hermosa, es un personaje que para mí es el mejor desarrollado por Taylor. La manera en que se desenvuelve junto con sus hermanos dioses para poder sobrevivir con poco, su forma de "vengarse" de los humanos de la ciudad de Weep que mataron a los dioses cuando ella era solo una bebé, pero también la manera en que los perdona porque sabe que no son del todo culpable, es: ¡TE AMO SARAI! La hace a Ella también parte importante de la historia. Y te digo que es la mejor parte. *Spoiler: de ella sale la segunda entrega de la bilogía, llamada "La musa de las pesadillas". Por otro lado, hay personajes que vas a comenzar amando y terminarás odiando. Y te puedo decir que lo único bonito de ellos sería su aspecto físico. Aunque sí, como todos los que intentan ser malos, tienen su historia de fondo de la que no quieren que nadie se entere para mantener su imagen. No obstante, sobra decir que Taylor ¡NO HACE HINCAPIÉ EN ESTO! Me encantó que ella no le diera mucha importancia a estos personajes; por lo que solo sirven para darle sentido a la historia. Como todo, también hay algo que no llega a gustarte mucho de la historia y en este caso, para mí, fue el hecho de un insta-love por parte de nuestros dos protagonistas Lazlo y Sarai, pero puedo decir que es tolerable. El libro en sí es muy esperanzador. Te impulsa a que sigas creyendo en tus sueños y luches por ellos. Recomiendo mucho tanto al libro como a la autora, si lo que buscas es un mundo de fantasía que te permita demostrarte como a través de la lucha y la valentía por tus sueños, puedes llegar a materializarlos tal como hizo nuestro amado Lazlo. |
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