Tumba de Dioses

Tumba de dioses es la esperada segunda parte de Nuncanoche, un libro que ya me sorprendió gratamente y se coló directamente en los mejores libros leídos de lo que llevamos de año por su originalidad, su estilo, su brutalidad, su madurez y su oscuridad, una historia sin pelos en la lengua que te atrapa completamente, y sin que te des cuenta, nada más comenzar. Volviendo a la narración en tercera persona a través de nuestra chica preferida, Mia, el libro se encuentra, una vez más, dividido en tres partes bien diferenciadas. La primera de ellas comienza poco después de los últimos acontecimientos del libro anterior, con la Iglesia Roja aún recuperándose del ataque, viendo sus consecuencias tanto dentro de ella como en los sentimientos de Mia, unos capítulos que, además, se van alternado entre pasado y presente, contándonos dos historias a la vez. al leer el libro anterior ya esperaba esa letra cursiva que tan característica que volvió en Nuncanoche, pero es cierto que, al empezar este, encontrarme con, de repente, dos historias me confundió al principio porque no sabía exactamente donde estaba Mia cuando regresábamos al presente. Sin embargo, eso pronto se me fue y empecé a disfrutar de este segundo libro sin problemas, teniendo aún esas preguntas de porqué esta ahí Mia, o porqué está pasando eso, descubriendo a la vez esos motivos que responden a esas preguntas, teniendo una lectura ya con bastante dinamismo al movernos de un sitio para otro, al dar con las primeras sorpresas y giros argumentales y al retornar a este estilo que tanto cautiva. Así pus, poco a poco todo va cobrando sentido, dos historias que se van desarrollando de manera paralela y que, antes de acabar esta primera parte, ya se unen, con todo ya establecido y formado, esa base y esa historia que seguirá a partir de ahora y que será el centro de todo este libro. Es así como empezamos la segunda parte del libro, dejando atrás esas dos historias plagadas de acción, descubrimientos, verdades, sorpresas, y nuevas decisiones que han formado lo que nos vamos a encontrar ahora, ya siempre en el presente, acompañando a Mia a través de un nuevo mundo que tiene un montón de cosas buenas que ofrecer. Con ella regresamos a los momentos tensos, de peligro, de mas estrategias, de más planificaciones, de cambios, de desarrollo de personajes, una segunda parte muy completa que avanza a buen ritmo, sin cansar, siempre ofreciendo algo, escenas marca Jay Kristoff, llenas de ironía, soberbia, contenido explícito y mucha, muchísima sangre. A pesar de ello, creo que Tumba de dioses tiene el mismo problema que Nuncanoche. Y es que esta segunda parte, sí, contiene de todo para que la lectura sea adictiva, entretenida, original, única, brutal. Pero también es una segunda parte que se desinfla porque, de nuevo, el autor se centra en contar algo que da mucho juego y vida pero que, sin embargo, vuelve a romper con ese algo que hace de estas historias el ser diferentes y únicas, mostrando momentos que otros libros antes que éste ya tiene. No obstante, la tercera y última parte vuelve a llegar con mucha potencia, siendo el escenario perfecto donde se expondrá y explotará todo aquello que se ha venido cociendo y conteniendo anteriormente, volviendo a tener escenas de mucho peligro, batallas, más vísceras y muertes y sangre, más giros argumentales que nos dejan con la boca abierta, con un final que te hará arrancarte de los pelos, que te dejará trastocada, que te dejará llorando al saber que no habrá continuación y tercer libro, como mínimo, hasta dentro de dos años.

¿Qué voy a decir ya que no haya dicho de estos libros? Tumba de dioses lleva el mismo estilo que Nuncanoche y, obviamente, vuelve a resaltar por lo mismo que la anterior y primera parte. Primero, sigue sorprendiendo esta ambientación tan bien lograda. Ya os dije en la reseña del libro anterior que uno de los puntos fuertes de esta historia es todo el universo en el que vamos a convivir junto a Mia. Sus tradiciones, su historia pasada, sus creencias, la religión, el sistema por el que la sociedad vive, su gobierno, esa diferencia entre la clase alta y la clase baja. Todo, absolutamente todo, vuelve a rebosar de vida. Lo más impresionante de todo esto es que, aunque en Nuncanoche nos empapamos bien de este mundo llamado Itreya, el autor todavía tenía muchos detalles que contarnos, ofreciendo hasta cosas nuevas cuando se creía imposible. Todo crece, todo aumenta, se ve más extenso, hay un más allá, las barreras se rompen un poco más. Y, aunque son cosas nuevas, el ambiente que se respira sigue siendo de peligro, de traición, de tener cuidado a cada paso, de muertes y mucha sangre. Eso no cambia, esa característica de esta República sigue siendo el mismo, con sus nuevos giros, sus nuevos secretos. Todo está muy bien montado e hilado, y nada se va a quedar cojo. Cuando crees que al autor se le ha olvidado algo que ha mencionado páginas y páginas atrás, él te lo devuelvo con el doble de fuerza para que te quedes, no solo contenta, sino también con la boca abierta. Si es que ya lo digo, el único pero que le he visto a esta continuación es esa mitad del libro en el que parece que todo se desinfla un poco. Porque todo lo demás es delicia pura.

Creo que ya conocéis a Mia por la cantidad de cosas buenas que conté de ella en la reseña de Nuncanoche, pero es que me tiene conquistada totalmente. Ya de por sí fue una protagonista muy completa en todos los sentidos, pero es que aquí sigue evolucionando y desarrollándose como persona. Vemos puntos nuevos de ella, una sed de venganza muy propia y común que ya conocemos, pero con algo más que la hace destacar otra vez. Me gusta que se profundice en sus sentimientos, en conocer mejor qué piensa, qué siente, y cómo lo ve todo. Que nos engañe y juegue con nosotros. Que nos siga sorprendiendo. Desde luego, no es para nada un personaje convencional y, mucho menos, una heroína. Junto a ella tenemos a personajes, no tan nuevos y otra que salen por primera vez, que tendrán algo de voz aquí. Por un lado tenemos esos personajes que nacieron con la Iglesia Roja: Jessamine todos los maestros de Mia, Mercurio... cada uno vuelve a tener su papel, alguno más irrelevante que otro. Pero, en sí, todos consiguen hacerse un hueco. Por otro lado, tenemos personajes nuevos que salen de este nuevo mundo habitado por los gladiatii. de nuevo, algunos sobresalen más que otros, cada uno con sus propios secretos. Creo que lo mejor sería no hablar demasiado de ellos, que cada uno y una los descubra poco a poco. Solo digo que, estoy segura, le vais a coger un cariño tremendo.

En conclusión, Tumba de dioses no deja indiferente a nadie que haya leído anteriormente Nuncanoche. Sigue estando a la altura, el ritmo es brutal, la ambientación es una gozada y Mia sigue dando mucha caña. Una segunda parte sorprendente, adictiva y que te deja con el alma y el corazón partidos. ¡Cuánto voy a sufrir la espera hasta el último libro!

Después de los últimos sucesos, la Iglesia Roja ha quedado casi destruida, sin embargo Mia se ha convertido en una Hoja de pleno derecho pero aún sigue planeando la venganza contra los hombres que ideron el asesinato de su familia. Mientras empieza a realizar los encargos que la Iglesia del Bendito Asesinato le ofrece, Mia empieza a dudar de que la organización para la que trabaja quiera lo mismo que ella, puesto que hay ciertas normas o reglas ante las que se somete y los hombres que Mia desea asesinar están bajo su amparo. Dispuesta a acabar con los hombres más poderosos de la República Mia idea un arriesgado plan que de salir bien podría servirle en bandeja lo que más quiere. Pero las cosas nunca suelen salir del modo en que se planean y pronto todo se tuerce obligando a Mia a improvisar sobre la marcha.

La verdad es que este segundo libro me ha gustado tanto como el primero. La historia se sigue centrando en el camino hacia la venganza de Mia Corvere quien esta vez centra sus esfuerzos en terminar con los dos hombres más poderosos de la República de Itreya, Julio Scaeva y el Cardenal Duomo. Pero en vez de desarrollarse en la Iglesia Roja, como el anterior libro, esta vez la historia se centra en el antiguo hogar de Mia, Tumba de dioses, lugar de la escuela de gladiatiis de los Hálcones de Remo donde Mia debe luchar para hacerse respetar y que le puede proporcionar la oportunidad de ganarse un puesto en el Venatus Magni, la competición de gladiadores más importante de la República, que otorga la libertad para quien se proclama vencedor. La verdad es que pensaba que este segundo libro iba a ser de transición pero para nada, el autor maneja muy bien esta nueva trama conectandola con las que ya conocíamos, además seguimos descubriendo más cosas sobre los tenebros, el pasado de Mia y alguna que otra revelación que unido a algunos giros en la trama que no esperaba ha hecho que me mantuviera pegada al libro en todo momento. Otra cosa que me sigue encantando es la ambientación, en este segundo libro se amplía y conocemos otros lugares de Itreya como la isla en la que creció Mia. La verdad es que me encanta que el autor se haya inspirado en el Imperio romano pero le ha conseguido dar su toque personal lo que ha originado un mundo muy original. En cuanto a los personajes, todos me siguen encantando (a excepción de Bryne), tanto los personajes que ya conocíamos como las nuevas incorporaciones son un muy buen complemento para la historia de Mia, además todos están muy bien construidos y desarrollados. Por destacar mencionaría a Mia por su gran evolución, me ha encantado la lealtad que demuestra hacia los que quiere o le importan y por no dejar que la venganza le nuble la mente. Aunque también destacaría a Eclipse y Don Majo, sus diálogos son bastante entretenidos. La pluma del autor también me sigue encantando, es muy ágil y descriptiva con lo que te mete de lleno en la historia aunque en mi opinión abusa de ciertos términos o expresiones pero en general eso mismo hace que tenga un estilo muy particular. La verdad es que me ha gustado que hubiese capítulos narrados desde dos momentos temporales diferentes y las anotaciones a pie de página del misterioso cronista. El final también me ha gustado, está lleno de acción y deja con mil ganas de leer el desenlace. En definitiva, un segundo libro increíble que estoy segura de que a todos los amantes de la fantasía les encantaría.

Tumba de dioses - Jay Kristoff

Trilogía 2.

(Crítica sin spoiler)

Aspectos negativos:

-Como decía anteriormente hay algunos términos que no acabo de pillar del todo.

-Sigo encontrando incoherente una forma de hablar como la otra. Hay palabras de época mezcladas con algunas en tono soez tipo: "las mierdas que me importa" o "mamón de mierda". Hacen una mezcla extraña de cosas antiguas con modernas que no entiendo. Como que haya esclavos, por ejemplo.

-Hay partes en cursiva que pertenecen al pasado y otras en letra normal que pertenecen al presente. El inconveniente que le veo a esto, personalmente, es que cuesta salir de una historia y meterse en otra. Y cuando leo al día siguiente tengo que releer las dos partes para no perderme.

-Siempre encuentro términos de supuesta gordofobia como: "tenía el cuerpo rechoncho de tanto comer y beber demasiado durante demasiados años".

-Supuesto machismo o palabras mal sonantes sexistas: "nadarías en chochito lo que te queda de vida". Hay algo en concreto que me resulta bastante machista, y es que el collegium de Remo se llame como el difunto marido de la actual dueña del collegium, que es Leona. ¿Por qué el collegium de Remo y no el collegium de Leona?

-Símil con los juegos del hambre, en términos como: "bienvenidos al cuadragésimo segundo venatus de puentenegro". Y de otro tipo como: diseñar una arena para el combate. En este caso no es una jungla, es un castillo. También encuentro otro parecido en diseñar la arena como un reloj como "en llamas". Y también en cómo llaman a Mía, "cuervo" y cómo llamaban a Katniss "sinsajo". Los dos son aves al fin y al cabo, ¿no? Pero al final nadie escribe algo original al 100% siempre hay retazos de otras cosas que ya se hayan inventado.

-Símil con vikingos: Hay un personaje que se llama "Ragnar". Y hay otra arena convertida en mar y barcos de estilo vikingo, pero nada más allá.

-Hay criaturas que me cuesta un mundo imaginar, aunque creo que no será tarea fácil describir a criaturas que inventas tú mismo, como le puede pasar al autor.

Aspectos positivos:

-A medida que voy leyendo las acotaciones me van pareciendo más graciosas, antes me resultaban algo densas. Se nota que la persona que escribe las acotaciones nos vacila que da gusto.

-Además de "dulcechicos" también hay "dulcechicas".

-Por otro lado el athenaeum es una maravilla. Y no es nada más y nada menos que la biblioteca de la iglesia roja que contiene libros que no existen, libros destruidos o libros muertos. Por si no lo sabíais, la persona que está al frente de esta bibilioteca, Aelio el cronista, está muerto.

-Como dato te diré que descansarás cuando llegues a la página 300 donde las dos partes, pasado y presente, se unen.

-Tengo que reconocer que cada libro que compone esta trilogía es original, y cada uno trata de una cosa muy diferente. El primero nos habla sobre la iniciación de Mia en la iglesia roja, y el segundo va sobre circo romano y muchos esclavos luchando por su vida.

-Las mejores partes de este libro y las más emocionantes son los combates.

-Por otro lado me parece curioso que las sombras de los tenebros adapten la esencia de sus dueños, como si fueran un fragmento de ellos.

-He de decir que juegan mucho con el espectador, nos hacen dudar de todo.

-Hay unas doce bombas, como yo las llamo, o si prefieres, doce sorpresas, doce cosas que no te esperas en absoluto.

EL FINAL: El final, para resumir, es intriga. Todo explota al final pero no se resuelve nada. Y si no eres capaz de coger "Albaoscura" al final, tienes mucha fuerza de voluntad.

Un señor libro.

Volvemos al mundo de Tumba Dioses y volvemos a las andanzas de la asesina Mia Corvere. En este segundo tomo de esta trilogía de fantasía, nos adentramos en la siguiente fase del plan de venganza de la joven Corvere o como nos dice Don Majo, en la narración de la vida de Mia. Después de conseguir su puesto en la Iglesia Roja y viendo su imposibilidad de acercarse a Duomo y Scaeva, decide arriesgarlo todo a una carta: el Venatus Magni. La gran competición de gladiadores.
Y sí, ¿qué narices está haciendo? Esto mismo se plantea en la novela, así que en un principio encontraremos una narración a dos tiempos: el primero, lo que sucede en el presente, Mia se ha autovendido para ser gladiadora; el segundo, la explicación de este plan tan descabellado.
Continuidad
Lo cierto es que cuando empiezas con una acción tan radical por parte de Mia te da por pensar que hay algo que no cuadra, que te has saltado algo en la historia. Sin embargo, como hemos dicho, el propio narrador (¿Don Majo?) se encarga de explicarnos qué ha sucedido. En mi caso, al principio me chocó un poco el cambio. Aunque me estaba gustando lo que estaba leyendo, es verdad que nos alejaba mucho del mundo casi oriental en el que nos habíamos metido en el primero y del mundo urbano (dentro de la idea del libro, claro) que teníamos en las explicaciones.
¿Qué es lo que pasaba entonces? Sin querer explicar mucho para no destripar nada, lo que sucedía es que estábamos evolucionando en el mundo e introduciéndonos, ahora ya sí, en las tripas del mundo de Tumba de Dioses. de este modo, la novela se desvía un poco del matiz de aventuras que tenía en la primera parte de la obra, para ser una novela de principalmente sangre y violencia y, en un aspecto secundario pero muy importante, de política soterrada. Así, el espectáculo está servido.
Recreación
El espectáculo está servido, sí, porque el autor ha utilizado como base los espectáculos de gladiadores romanos, junto con sus intrigas políticas en los palcos, fusionados con las particularidades propias de este mundo: razas diferentes, criaturas, pruebas. Una fusión que concreta no solo en el modo, sino también el fondo, ya que en esta novela se desarrollarán las ideas de lealtad y honor, dos cosas que parecían alejadas de nuestra protagonista y que, sin embargo, tienen más peso que nunca.
De este modo, nos acercamos a un escenario, concepto y descripciones muy sólidas, por su correspondencia con la realidad, pero que a la vez impresionan por su magnitud, su crueldad y su crudeza. No entendamos que estamos ante una novela gore, que cabe decir que hay partes intensas en este sentido, sino ante una novela que quiere enseñar la crudeza del sistema político del consulado y de la diferencia de clases que este establecía. Una maravilla en la fantasía que nos sirve también para acercarnos a entender algo de nuestra historia antigua.
Y repito, el autor lo hace de manera magistral. No pierde un ápice del mundo ni de la esencia de Mia, pero la hace madurar en un entorno hostil, cruel y despiadado que nos involucra como lectores no solo por nuestra protagonista, sino por lo que le rodea.
Ampliación
Junto a la historia de Mia Corvere, el lector asiste a dos narraciones más.
Por un lado, tenemos la que nos ofrece las notas al pie, que en este caso creo que han sido menos, y que nos amplían el mundo a través fábulas, hechos históricos y anécdotas. Es cierto que, por lo que he ido leyendo en los grupos de lectura, esta parte sigue sin gustar porque saca de la historia. En mi caso, las disfruto mucho porque creo que el punto de comicidad, ironía y sarcasmo está ahí y me ayuda a aligerar tensión en algún caso. Continuamos con ellos, para quien os guste.
Por otro lado, tenemos la historia de los tenebrae. Podíamos pensar que en esta parte Mia se iba a interesar más por lo que es, pero es verdad que en este sentido se queda a medio gas con la investigación. No obstante, eso no implica que no sepamos más; esta línea de la historia continúa, dándonos sustos y sorpresas y creándonos, quizá, más preguntas que respuestas.
Satisfacción
La verdad es que la primera vez que comencé con el primero, me costó mucho centrarme y lo terminé abandonando, sin embargo, nunca me dejó de llamar la atención el libro. A día de hoy, me alegro mucho de haberlo empezado porque hacía mucho que un mundo no me parecía tan normal (siendo de fantasía) y que lo que me sorprende y engancha del libro es la manera de narrar.
Creo que el tono, el carácter y la crudeza con la que caracteriza el autor diálogos y personajes es el punto clave para que me guste tanto. Sería algo así como una sinceridad brutal en la creación y complicaciones del mundo, no sé cómo explicarlo mejor. Asimismo, las aproximaciones a nuestra realidad en conceptos y cuestiones políticas hacen que el lector se involucre, creando una fantasía diferente, adictiva y única.
Espero que si no habéis leído la primera parte, os animéis porque merece la pena. Si por el contrario, habéis leído el primero y no este, ya estáis tardando, ya que la historia de Mia promete y mucho. En cualquier caso, espero que lo disfrutéis, cuervos.


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Tras entrar en la Iglesia Roja y convertirse en hoja, Mia comienza su nueva etapa como asesina, pero no es oro todo lo que reluce y en uno de los encargos se da cuenta de que la propia Iglesia le impide realizar lo que ella más sueña, vengar a su familia.
La trama principal sigue siendo la venganza de Mía, y esta vez la intentará llevar a cabo convertida en gladiatii y ganando el Venatus Magni.
Pero por si eso fuera poco, la cantidad de subtramas relacionadas con mentiras, corrupción, conspiración, supervivencia, verdades dolorosas y como no, muertes (muchas muertes), harán que convertirse en vencedora sea mucho más complejo.
Si en el anterior libro, la ambientación nos recordaba a Venecia, en este nos vamos directamente a la antigua Roma, con sus Circos Romanos llenos de gladiadores. (Si, al más puro estilo Gladiator…)
Mia (y nosotras) estábamos acostumbrados a una Itreya llena de bailes y lujos, a los callejones de Tumba de Dioses y la oscuridad de la montaña de asesinos, pero ahora nos vamos directamente a otra realidad totalmente desconocida y dura a partes iguales.
Y es que vemos como el sistema politico y religioso está podrido, descubriendo que el poder de unos es la decadencia de otros, y que la base de este gobierno es la esclavitud.

El ritmo es de locura. La forma que tiene de escribir el autor es adictiva, lo único que queríamos era leer.
Las cosas que suceden, las verdades que van saliendo a la luz, junto a momentos de acción, hacen que la intensidad no decaiga en ningún momento. Y nosotras solo pedíamos más y más.

Los personajes son maravillosos. Los principales, los secundarios y los efímeros. No hay nadie que esté allí de relleno, ya que todos tienen su papel en la historia.
Nos encontramos con nuevos personajes secundarios, como los Gladiatii o los sanguila, complejos y llenos de matices.

Algo que nos ha llamado la atención es que, aunque el personaje sea pequeño y no tenga mucho protagonismo, tiene su propia historia. Eso nos encanta, porque da la sensación de que los conoces, y sabes por qué están allí y de qué manera han llegado.
Eso sí… no os encariñeis mucho con ninguno, porque al autor no le tiembla la mano a la hora de ir matando gente.

Si os gustan los libros con diferentes plot twist, en este os vais a hartar de ellos.
Los tenemos de todo tipo: grandes, pequeños, de acción, de secretos, de amor… Vamos, que nos hemos sorprendido con todo lo que pasa.
Además, muchas cosas de las que suceden hacen que situaciones o conversaciones del libro anterior cobren sentido.

Y es que ese final… ¡¡MADRE MIA!! No sabemos ni como explicar lo que hemos sentido con el desenlace, sin haceros spoiler.
Hemos leído capítulos enteros aguantando el aliento, necesitando parar unos minutos para asimilar todo lo que estaba pasando.

Sin duda este libro tiene todo lo que funcionaba en el libro anterior pero mejorado. Personajes complejos y bien estructurados que evolucionan, una ambientación impresionante, una trama que no deja indiferente a nadie y un final de locura.
Y aunque nuestras expectativas están en alza con respecto al final, estamos casi seguras que no va a defraudar.

LO QUE MÁS:
✅La intriga que genera se expande como el gas, y la única manera de no asfixiarte es leer sin parar.
✅Mia Corvere es la asesina que merecemos.
✅Cada personaje que aparece, grande o pequeño, tiene un papel que aporta algo importante a la historia. No hay nadie de relleno.
✅La pluma del autor es exquisita.
✅El estado de sorpresa es continuo porque hay plot twist constantemente (y no vimos venir ni medio).
✅La complejidad del worldbuilding sigue aumentando.
✅No han inventado todavía las palabras que expliquen lo que sentimos con el final.
LO QUE MENOS:
❌Nada que decir, mi señoría.

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