Un tazón de tristeza para Leiza

Durante el desayuno, Leiza se encuentra con una gatita en su ventana, se encariña tanto que la adopta. Sus padres le explican que seguramente le pertenece a alguien más, pero hasta que no encuentren al dueño pueden conservarla.

La gatita va y viene creando con Leiza momentos felices, hasta que un día no vuelve, al parecer su dueña la ha encontrado.

Este libro se centra en la tristeza, enseñando que la tristeza es perfectamente normal y sana, llorar nos sirve para desahogarnos y también para sentirnos mejor con nosotros mismos.

El libro incluye una guía para los padres de familia, incluye recomendaciones para ayudar a comprender y manejar de forma positiva la tristeza.

Las emociones no pueden ser controladas, pero ayuda mucho dar un nombre a lo que uno siente, ahí es donde comienza la educación emocional.