Área 81

"Área 81" es un relato de Stephen King que me ha dejado impactada nada más empezarlo. "Área 81" está dividido en 6 capítulos, que he devorado del tirón.

Lo primero que me ha llamado la atención, es la sensación de inocencia de los niños. Esas ganas de encajar, de pertenecer a un grupo y de pensar que tienes algo guay y nuevo que enseñarles. Eso es lo que le pasa a nuestro protagonista, Pete Simmons. Lo mismo cuando acude al área abandonada, área 81, en busca de algo diferente de lo que poder presumir, algo de mayores. Seguro que, el que más el que menos, ha tenido ese sentimiento de pequeño, y Stephen King, ha sabido representarlo muy bien.

Es con la llegada al área 81, cuando mi angustia empezó a crecer. Algo iba a pasar, eso estaba claro, pero no sabía por que camino iba a llegar la sorpresa, ni en forma de que, ya que conociendo a Stephen King, cualquier cosa era posible.
El pequeño giro que ha tomado el relato haciendo referencia a Christine y Buick 8 me ha encantado. No he leído aún esas dos novelas, aunque sí se de que tratan como para haber reconocido el guiño que ha hecho.

"Área 81" es un relato angustiante, en el que conforme pasan los capítulos, el horror aumenta. Es complicado en tan pocas páginas, sólo 73, conseguir lo que consigue Stephen King: que la tensión aumente con cada nuevo personaje y que no se vea el final de la historia. Porque eso es lo que me ha pasado, no veía cómo podía acabar de una manera "buena", sin que "Área 81" fuese una completa carnicería. Como se suele decir, "no queda ni el apuntador".

No hay duda de que Stephen King se ha ganado el título de "maestro del terror", pero me gusta también ese toque personal, que hace pensar, que se encuentra de trasfondo en la historia personal de cada personaje que llega al temible área 81.