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Si sois "lectores constantes" seguramente estaréis de acuerdo conmigo: King es uno de los escritores que mejor plasman el sentimiento de pérdida. La pena, la añoranza, el desgarro cuando la pérdida es dramática, la sensación de desamparo, la incredulidad, el desánimo...Tenemos muchos ejemplos a lo largo de su extensa obra, uno de los más impactantes lo tenéis en Cementerio de Animales, y en la novela de la que voy a hablar hoy también vamos a sentir la pérdida del protagonista como si fuera algo nuestro, aunque tengo que decir desde ya que no es el eje central de la trama. O igual sí... En este caso tenemos al personaje principal, un escritor ( qué raro...🙄) que acaba de perder a su esposa y que ve cómo su mundo se desmorona y lo único que puede evadirle de su sufrimiento, la escritura, también le abandona de forma fulminante. El bloqueo del escritor, otro de los temas recurrentes de King... Es entonces cuando Mike, que así se llama, decide ir a Sara Risa, la propiedad que posee a orillas del lago Dark Score, donde espera encontrar la paz y la inspiración. El comienzo de esta novela se va cociendo a fuego lento, como en muchas otras de King. Para mí no es relleno, realmente me interesa ese momento en la vida del protagonista y su forma de enfrentarse a las situaciones de la vida cotidiana. También vemos cómo decide trasladarse a su casa del lago, y allí nos damos cuenta de que nos encontramos con una de esas poblaciones cerradas que no dejan mucho margen a salirse de lo " normal ". Es aquí cuando la acción comienza a tomar el protagonismo que ansiamos y, sin darnos cuenta, nos encontramos a nuestro escritor metido de lleno en un maremágnum de pesadillas, visiones del pasado, secretos inconfesables y vecinos bastante antipáticos y metomentodo. Y como os podéis imaginar la cosa no toma una salida fácil y la parte final es de auténtico infarto, con pasajes verdaderamente escabrosos e incluso incómodos de leer. Muy intenso, pero eso quiere decir que deja muy buen sabor de boca. Para mí siempre es un placer volver a King En este caso ha sido con una novela que no es de las más conocidas del autor y por eso me ha sorprendido tanto. La he disfrutado mucho, leer a King es como volver a casa, su prosa me es cercana y familiar desde el primer momento, y aunque a veces nos la encontremos un poco desordenada siempre es bueno volver. |
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