Tengo un nudo en el estómago. Si algo he descubierto de King en estos meses es que sus libros no dejan indiferente a nadie y también que es cruel, muy cruel. Tras terminar esta lectura me surgen algunas dudas y preguntas. ¿Hacia dónde avanzamos como sociedad? ¿Qué estamos haciendo con nuestros jóvenes? Cien jóvenes participan en una carrera donde el ganador alcanzará gloria, fama y fortuna pero el coste, a mi modo de ver, será demasiado elevado. Sólo puede quedar uno... No entendí demasiado bien qué es lo que King pretende transmitir en esta novela. ¿La irresponsabilidad e inconsciencia de la juventud? ¿Lo morbosa y poco empática que es la sociedad? He llegado a pensar que disfrutamos con las miserias de los demás para olvidar las propias y donde esté un buen espectáculo que se quite todo lo demás. Nos hemos vuelto insensibles y es realmente penoso. A estas alturas creo que no descubro la pólvora si digo que King es magnífico y escribe como le da la gana, pero sí tengo que decir que en esta ocasión, para mí, ha sido muy detallista en lo escabroso y nos escatima información para entender un poco más esa sociedad que nos presenta o los motivos de los corredores para participar en la carrera (creo que únicamente me quedó claro la motivación de uno de los participantes, es más, no llegué a entender por qué se apunta el protagonista a este infierno). Durante las próximas semanas no le voy a quitar ojo de encima a mi niño (tiene dieciocho años, aún está en edad de que el Comandante lo pueda reclutar). + Leer más |