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Que hermosa sorpresa fue para mí leer este libro! Es corto, solo tiene 170 páginas y se divide en seis capítulos con hermosas ilustraciones al inicio de cada uno. Scott Carey, el protagonista, está pasando por algo muy raro, pierde peso de manera constante pero su cuerpo no refleja cambios. El no desea ser objeto de investigación, así que solo habla del tema con un doctor amigo. Lo más lindo es que lejos de sentirse mal por todo lo que está viviendo, decide utilizar su tiempo en cambiar su propia vida y su entorno, buscando que la pareja de mujeres casadas que llegaron recientemente encuentren su lugar en el pueblo y entre su gente bastante cerrada de mente. El libro se lee muy rápido, se disfruta tanto como sus novelas más apreciadas más allá de ser una historia súper sencilla. Toca temas muy necesarios y actuales como la aceptación, los prejuicios de la gente y la discriminación, nos enseña mucho y nos da la esperanza de confiar en que las personas pueden cambiar. Una nueva prueba de que el autor escribe con maestría más allá del terror, que tiene mucho más para ofrecer de lo que podamos esperar de él, nos muestra una faceta muy distinta de él, y creo que la mejor forma en que puedo describir este libro es: una caricia al alma que llega y nos eleva. Totalmente recomendado si ya aman leer sus libros, y también para quienes no se animan aún a conocer su obra. |
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