El resplandor

Un clásico que hasta ahora no había leído. ¿Quién no conoce o ha oído hablar de este libro o de la película protagonizada por Jack Nicholson?

Este es el libro de terror por antonomasia. El protagonista, Danny, es un niño de cinco años, muy inteligente para su edad, que tiene un don muy especial. Cuando su padre, Jack Torrance, alcohólico rehabilitado que acaba de perder su empleo, encuentra un trabajo como vigilante de invierno en un hotel de las montañas que queda aislado durante unos meses por la nieve, él y su mujer Wendy, junto con el pequeño Danny, se mudan allí, en un intento de salvar su familia y salir del bache que están atravesando. Pero el hotel Overlook es algo más que un simple hotel.

No suelo pasar miedo con los libros de terror, sólo tensión por saber lo que ocurre con los protagonistas, pero en este libro he sentido de todo: miedo, tensión, angustia. Miedo, porque hay escenas que se las traen (y eso que no creo en lo paranormal); tensión, porque hasta el último minuto King te tiene en vilo; angustia, porque ves cómo les va afectando individualmente.

He leído este libro en un club de lectura, que marca metas de forma que todos leamos lo mismo para no avanzar unos sobre otros. Reconozco que me ha costado un triunfo parar de leer, hasta que al final no lo he conseguido y he tenido que avanzar; tenía que saber cómo terminaba, no podía con la tensión.

¿¿Cómo no había leído antes este libro?Me he quedado impactada, menuda historia nos cuenta King con apenas tres o cuatro personajes. Es una auténtica pasada. El nivel de terror psicológico es brutal, hay ciertas escenas realmente escalofriantes y el nivel de adicción es muy fuerte. No puedes dejar de leer. El niño protagonista es un personaje tan fuerte y magnífico que no se me va a olvidar nunca. Los otros personajes y situaciones creo que tampoco.No tengo palabras para expresar cuánto me ha gustado el libro.
En su día vi la película, y sólo recuerdo que me dio mucho miedo, pero no es como el libro.
Os lo recomiendo encarecidamente.

La novela cuenta con un introducción larguísima que no aporta mucho y que me ha resultado tediosa. Pero es un adjetivo que le viene bien a la mayor parte de la novela, que parece más hecha para aburrir que para entretener. Ya ni hablemos de aportar algo a la Literatura. le falta terror y esa inquietud que sí transmite la película, y le sobran chorradas como la de los setos o esa "máscara verde de vampiro". Tampoco tiene un final o una prosa brillante, así que no hay mucho a lo que agarrarse. Además, hay diversas incongruencias con fechas y alguna otra cosa; por ejemplo, se habla de una puerta de media pulgada -o sea, 1,27 cm- como si fuera infranqueable y gruesa. Otro punto incongruente es que Halloran, después de empatizar con Danny, deje que el niño se quede allí encerrado durante meses. Fíjense que él mismo no se siente seguro allí, tal y como se revela en el capítulo 38. Por si todo esto fuera poco, el señor King invade la novela de derechazos misóginos -que si el padre de Wendy murió por culpa de la madre de esta, que si una paliza del padre de Jack a la madre de este fue necesaria, etc.- y sexualizaciones gratuitas como pezones que se marcan a través de vestidos. Pero ojo a lo que le dice un personaje al pequeño Danny, de cinco años, después de decirle que le va a comer: "[...] I'll start with your plump little cock". En fin, ¿quién quisiera tener el señor King como vecino? Tampoco tiene la complejidad de la película en cuento a simbolismos y elementos a analizar, porque aquí no hay laberinto, no se habla de que el hotel fue construido sobre un cementerio indio, no hay dos Grady, no se insinúa que Jack abuse sexualmente de su hijo... En fin, nada de nada. Por cierto, mantened en secreto la similitud entre esta novela y la titulada 'Burnt offerings' de Robert Marasco, publicada solo cuatro años antes.
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Obra maestra del terror y para mí de las mejores de King. Te sumerge en esa atmósfera de inquietud y temor trasladándote al Hotel Overlook. Mucho mejor que la película que, en mi opinión, está altamente sobrevalorada y no hace justicia al libro.

Nota: 4 sobre 5

Premisa:
Danny tiene cinco años y es capaz de saber lo que piensan los demás, o de predecir determinados sucesos que acabarán pasando. Sus padres tienen una relación complicada que están intentando arreglar desde hace tiempo. A su padre le surge la oportunidad de trabajar cuidando de un hotel abandonado durante la época invernal, por lo que se irán todos juntos para allí. Lo que en un principio parece un trabajo fácil va a llevar a esta familia situaciones escalofriantes.

Opinión:
Este autor es proclamado como el rey del terror. Y la verdad, después de haber leído unos pocos libros suyos puedo entender el porqué de esta denominación. Este hombre sabe crear la ambientación ideal para generar angustia y desasosiego. Esto lo hace como nadie y esta novela es un claro ejemplo de ello. Eso sí, no te puedes esperar que sean 650 páginas llenas de acción y de escalofríos. No, eso no va a suceder, porque se toma muy enserio la contextualización, las descripciones y explicaciones (que en realidad no son del todo necesarias). Vamos, que adora escribir muchas páginas y meter mucha paja. Sí que es verdad que una vez que lo has leído, piensas: bueno, en el fondo esto viene bien saberlo y enriquece la historia. Pero también hace que el libro se haga algo pesado y tengas ganas de que llegue el momento del acelerón. ¿Qué ese momento al final termina llegando? Pues sí, lo hace, y de qué manera. Por esta razón se le perdona todo. Pero creo que es importante tenerlo en cuenta. Por otro lado, los componentes paranormales que introduce en sus novelas a mi me encantan, me parecen el complemento perfecto al terror. Me hacen disfrutar como una niña pequeña, y es verdad que tiene una manera de narrar muy ágil y directa. Por lo tanto, seguiré leyendo sus novelas hasta que me canse.

Esta fue la primera vez que leí a Stephen King, tras ver la película de Stanley Kubrick (que el autor aborreció). Ambas historias me encantan, aunque no me cansaré de repetir que Kubrick (uno de mis directores favoritos) hizo una gran película (he perdido la cuenta de las veces que la he visto), pero una adaptación pésima.

Una vez que lees el libro y conoces el contexto por el que Stephen King estaba pasando, entiendes su animadversión hacia el largometraje; ya que la novela nos presenta a Danny Torrance, un niño con una facultad muy rara y poderosa: resplandece, ve hechos que pasaron, que pasarán, es telépata y percibe cosas que el resto no puede. Algo que hubiera preferido no tener cuando su padre, Jack Torrance, es contratado como cuidador de invierno en el Hotel Overlook, un lugar que tiene su propia y oscura historia y que quiere hacerse con el niño a toda costa.

En el libro podemos ver la parte humana de Jack, un personaje en el que King volcó muchas de sus propias inseguridades y miedos, uno de los más autobiográficos de su carrera, dados su alcoholismo y su adicción a las drogas, sin las cuales él creía que no tendría talento para escribir. Podemos ver la lucha interna y un amor por su hijo que la película obvió en aras de mostrar un monstruo más terrorífico. Y podemos ver la gran alegoría en la que convirtió al hotel, que en realidad es el alcohol apoderándose de todo lo que toca.

Y sin embargo, después de todo, recomiendo una y otra hasta hartarme como dos obras maestras, cada una en lo suyo. Igual es porque yo no resplandezco...

Seamos sinceros, ¿A quién no le gusta una buena historia de terror? O al menos, ¿Sentir un poco de escalofríos, cuando nos cuentan una buena historia?

Este libro es el equivalente de una caja de toques, en cuanto a escalofríos, y todo se debe a la excelente atmósfera que nos plantea el autor, en donde el misterioso hotel Overlook parece jugar con las emociones y las culpas de sus habitantes.

¿Cómo superar los errores del pasado, si estos parecen perseguirnos constantemente? ¿Acaso podemos escapar a ellos y a las consecuencias? Si a esas preguntas se les suman una serie de eventos sobrenaturales, que parecen incrementar las ansias de enviar todo al demonio, se nos entrega una historia en donde la bondad, a pesar de los esfuerzos, parece no ser suficiente.

Una lectura conjunta, que empezó de cachondeo y como un reto, se ha convertido en la lectura del mes.

Y es que, El resplandor es una novela que te mantiene en vilo desde su comienzo.

El resplandor consta de cinco partes en las que el maestro King nos lleva en continúas subidas y bajadas emocionales en las que el lector no puede pensar en nada más que en “qué pasará”.

King juega con nuestras mentes y hace que nuestra imaginación se prepare para lo peor en cada capítulo. Deja que nos relajemos y que volvamos a imaginar lo peor constantemente. Juega como un gato con un ratón hasta el agotamiento, donde no quieres leer más, y no puedes parar de hacerlo porque necesitas conocer el final.

King nos muestra unos personajes raros y espeluznantes, desde el primero hasta el último. Todos son siniestros, algo asquerosos, insoportables para la imaginación del lector. Te enfadas e indignas con ellos, por las estupideces que cometen, por sus comentarios…

King logra que te metas en la lectura de tal modo que hace que leas su novela en cuatro ratos para descansar, para conocer qué ocurre en la habitación de un hotel, para entender. Y aunque comprendes, padeces, sufres y teorizas constantemente, no puedes parar de leer.

Una novela que nunca hubiera leído de no haberla disfrutado junto a Sarai e Isabel y, pese a lo mal que lo hemos pasado, ¡cuánto hemos disfrutado y qué buenos y malos ratos nos ha dado!

Como amante de las pelis de terror, hace años que fui testigo del despliegue de talento de Jack Nicholson en “𝑬𝒍 𝒓𝒆𝒔𝒑𝒍𝒂𝒏𝒅𝒐𝒓”. Y como la peli me había encantado, cogí el libro pensando que al conocer la historia no iba a sorprenderme. Craso error. Este libro es una auténtica pasada y os cuento porqué.

“El resplandor” de King no tiene nada que envidiarle al de Kubrick, y es que, aunque tras haber leído el libro tengo la sensación de que el fondo de la historia es el mismo, las perspectivas son tan diferentes que el asunto cambia por completo.

Mientras que en la peli el protagonista claramente es Jack, el padre🪓 en el libro, Danny, el niño, es quien lleva la voz cantante y os aseguro que eso hace que la historia sea totalmente distinta, porque Danny es un protagonista de diez. A King siempre se le han dado bien los personajes, eso es un hecho, pero dar vida a Danny, con sus particularidades y mantener la esencia infantil del personaje, tuvo que ser todo un reto para el autor.

Y el otro protagonista indiscutible de la novela es el Hotel Overlook. ¿Puede ser el mejor antagonista que he leído en mucho tiempo? Pues sí. Esa monstruosa infraestructura me ha puesto los pelos de punta en numerosas ocasiones. Mientras que en la peli no pasa de ser otro edificio encantado, aquí es un personaje más al que King ha conseguido dar vida de una forma fascinante.

Tanto el libro como la peli merecen totalmente la pena en mi opinión, pero he de reconocer que he pasado momentos más tensos y espeluznantes con el libro, quizás al estar narrado desde la perspectiva de un niño todo resulta más terrorífico, pero sin duda como protagonista Danny es el ganador indiscutible.

Qué podemos decir que no se haya dicho del maestre del terror y una de sus óperas primas. En el Overlook encontraremos algo más que fantasmas, lo que en verdad da sentido a la obra y te atrapa como esa entidad (digámoslo así porque es mucho más complejo) que se apodera de la familia Torrance. Me ha encantado, cosa que en la película no se aborda, la personificación del hotel; el fantasma entre los fantasmas.
La película ya era una de mis favoritas, pero el libro la supera con creces.
No le doy cinco estrellas por ese principio (y no tan principio) que se hizo pesado. La historia se toma su tiempo. Indaga hasta el mínimo detalles en el la vida de los personajes.
Claro, no lo sabía hasta que recientemente supe que este es parte del estilo del maestro King: la historia se cuece a fuego lento y, en el transcurso, te presenta, pero bien, a los personajes para que empatices, para que al final sientas con ellos, te trasmitan el mismo terror. Sobra decir que esa es la clave del éxito de Stephen King en el género de terror.