El juego de Gerald

Aunque Stephen King es de mis autores favoritos y puedo decir que hasta ahora todo lo que he leído suyo me ha gustado en mayor o menor medida, “El juego de Gerald” es, con diferencia, la novela que menos me ha gustado hasta la fecha. No quiero decir que me parezca una mala novela, al contrario, es muy potente y la protagonista tiene una evolución psicológica brutal a lo largo de la narración. Pero en términos generales no me ha terminado de convencer la historia.

La novela comienza de manera frenética, poniéndonos en situación y arrancando una historia que pinta ser muy grotesca. Y lo es, pero en mi opinión, muy lenta. Como dije antes, comienza de manera brutal pero va decayendo según avanza la historia. Hay capítulos que se me hicieron eternos y que están cargados de descripciones, que ayudan a que el lector pueda imaginar y sentir la escena como la está viviendo la protagonista. Estás descripciones no me molestaron mucho, ya que King suele ser muy descriptivo, lo que me molestó es lo repetitivo que es King en esta novela. En un solo capítulo repetía lo mismo 3 o 4 veces, y sé que su intención era que el lector se viera en la misma situación que la protagonista, pero a mí me sacó mucho de quicio.

El final me gustó y no me gustó. Me gustó porque es más ágil de leer y se devora rápido, y no me gustó porque no me cuadra con la historia en general. Esperaba que por como se nos estaban presentando los hechos, el final fuera mucho más potente y frenético. El final parece otra historia aparte de la trama original que está metida ahí como cuando encajamos dos piezas de un puzzle que no van, pero le damos golpes hasta que encajen.

En resumen, no considero que sea un mal libro, pero la manera en la que King lo ha llevado a mí no me terminó de convencer.

"Jessie había descubierto que la compasión era algo que resultaba barato y, en consecuencia, se derrochaba después de una tragedia."

Una novela que parte de una premisa bastante sencilla y ambientada de un único lugar, una casa cabaña aislada, con el paso de las páginas se revela como obra extraña y extremadamente catártica, desafiante y satisfactoria en su gran parte. Es íntegramente el monólogo interior, con unos fantasmas más vivos que nunca, de una mujer inmovilizada en una cama. King potencia sus virtudes planteando un relato donde no traiciona su estilo aunque se regodea en demasía en algunos aspectos que pueden acarrear lentitud.

Si hay algo de lo que el autor de Maine puede enorgullecerse es de ser capaz de construir a la perfección la mente de sus personajes, trasladarlos a la del lector y dotarlos de emociones, motivaciones y esperanzas creíbles en nuestra piel. La empatía que conseguimos con Jessie genera en la atmósfera idónea para la trama, para que sintamos el agobio ante las circunstancias de esa habitación o las complicaciones de ese atroz pasado. Me fascina ese ente, hombre pálido, lleno de ambigüedad y preguntas por contestar.

La trama desemboca en una aventura personal con cierta complejidad psicológica. Funciona como thriller claustrofóbico, o una historia que hace malabares con los terrores estereotipados de la sociedad y una infancia destruida, que se sostiene bien pese a algunas carencias. En conjunto deja buenas sensaciones, un libro sólido, cargado de angustia y bastante entretenido.

La verdad que esperaba mucho más de esta historia, con un comienzo muy inquietante, nos mete de lleno en una situación que realmente da auténtico terror, pues verse en la situación en la que se encuentra Jessie no es plato de buen gusto y el autor nos presenta otro tipo de terror al que estamos acostumbrados. Destaco como de costumbre en mis reseñas, los personajes pues me parece que están muy bien construidos, aunque en este caso no hay muchos. 

He sentido muchos altibajos a medida que avanzaba, creo que esta vez, King se ha excedido con las descripciones. Cierto es que algunas son muy explícitas, pero encuentro mucha "paja" en todo el libro, algunos capítulos son demasiado densos y para mi gusto sobraban. Algo que si me gustó fue el pasado crudo y turbio que muestra la protagonista, me costó incluso leer algunas partes y es algo difícil conseguir en mí. 

El final mejora considerablemente, no obstante, se mezcla con otra historia que para mi gusto está añadida sin más, y podría haber tenido más acción o protagonismo en la trama.

En resumen, una historia que empecé con muchas ganas pero que fue decayendo a medida que la leía, aunque cobra fuerza al final, no me terminó de convencer y no encajó con lo que esperaba. 

Siempre con respeto hacia las diversas opiniones, pero no fue para  mi. 

Stephen King sin duda alguna es un escritor fuera de serie, por supuesto su imaginación no tiene límites y a pesar de que él siempre diga que lo han encasillado en cierto género, la verdad es que más bien creo que a él le encanta escribir sobre toda esa parte retorcida de los seres humanos.

La historia de este libro es increíblemente agobiante, Jessie y Gerald se van de fin de semana a una casa de campo para tener unos días juntos y además probar algunos juegos sexuales, así pues, Gerald ata con unas esposas a Jessie en la cama y sin entrar en detalles Gerald muere y Jessie se queda esposada en la cama sin posibilidades de que nadie la escuche, vaya a buscarla y sin poder moverse.

La historia es una genialidad no solo por el argumento que acabo de contar, si no todo lo que sucede en la cabeza de Jessie, toda su retrospectiva, su angustia, su miedo, su pánico, su terror, los mecanismos de autodefensa y este eterno monólogo que tiene Jessie durante el proceso y todo lo que le sucede, a partir más o menos del 35% del libro viene un quiebre de historia, de ritmo narrativo e incluso del ambiente creado alrededor de los hechos. Desde la primera hasta la última página este libro es absolutamente genial.

Pero más allá de la historia, tenemos la pluma de Stephen King, la manera en que nos ha creado el ambiente, se siente la angustia, de hecho, me ha costado mucho trabajo leer este libro por eso mismo, me costaba continuar porque de verdad me asfixiaba, lo había abandonado por ese motivo en una ocasión y en esta segunda oportunidad, no digo que quise abandonar, pero sí que me costó tener que pasarme el trago de la angustia.

Ahora bien, la genialidad no se queda en la forma en que nos recrea ese ambiente, si no la forma en que King va cambiando de ritmo, de ambiente e incluso de estilo narrativo conforme va avanzando la historia, así como Jessie va evolucionando en la historia, así King con su estilo narrativo, donde había asfixia y angustia, ahora hay miedo y pánico, donde había miedo, ahora hay calma y luego el ritmo narrativo se acelera para volver a caer en bajada para terminar en la calma.

De verdad ha sido fascinante ir recorriendo este camino con Stephen King, me cuesta trabajo expresar con palabras la mucha inteligencia literaria que he visto en este libro, que, como he dicho, va mucho más allá de una simple historia.

El final fue completamente inesperado para mí, por supuesto que me gustó y también me gustó mucho el personaje de Jessie, tan complejo.

Fue fascinante leer este libro, por la historia y por la manera en que este señor genio literario va cambiando y adaptándose a su propia historia.

No siempre hacemos relecturas de libros que nos han enemorado. A veces, intentamos darle una segunda oportunidad a un libro pensando que tal vez no lo leímos en el momento apropiado. No fue mi caso. Debería haberlo sabido porque lo recordaba bastante bien a pesar de haberlo leído hace mucho, mi mente es así: le gusta más que recuerde los malos momentos que los buenos...

El libro empieza muy bien, creo que tal vez demasiado. En poco más de 50 páginas tenemos una damisela en apuros al encontrarse esposada a los barrotes de la cama sin nada que la cubra salvo una braguita de biquini, con su marido muerto en el suelo y las llaves de las esposas lejos de su alcance. No hay nadie en las cercanías de la casa en la que todo esto transcurre y la angistia no puede ser mayor. Una vez leída esta soberbia introducción en la historia, King me perdió en una de las mil ramas en las que se enreda. Ramas que me desligaron de la historia y hacían que no me interesase demasiado lo que iba a pasar. Que sí... que lo sabía... pero en su día me sucedió lo mismo: leía sin demasiadas ganas, aunque al menos tenía la esperanza de que la situación cambiase...

Creo que le sobran páginas (y eso que no es un tochoking), en formato novela corta habría estado mejor porque no se habría extendido en historias del pasado que, aunque no estaban mal, además de ser más extensas de lo necesario, sobraban. Como siempre, desde mi punto de vista ¿eh? Pero se supone que si introduces una historia del pasado que tiene nada que ver con lo que está sucediendo, que al menos aporte algo interesante sobre la personalidad del personaje o que pinte algo en el futuro de la trama ¿no?

Mi otro problema fue Jessie, la protagonista, con la que no llegué a empatizar y a la que no me importaba demasiado lo que le pasase (aunque esto últimoya lo había mencionado). Me parece un personaje que King pretendía que fuese fuerte (de ahí la historia del pasado), pero comparado con otros a los que le ha dado vida se quedaba muy, pero que muy corto...

Lo dicho, un libro que a pesar de ser de los imprescindibles para muchos, ha vuelto a pasar por mis manos sin pena ni gloria y sigue permaneciendo en la parte baja de mi ranking personal del rey...

En una cabaña alejada de la ciudad, Jessie es esposada a la cama por su marido Gerald para practicar juegos sexuales, pero Jessie no está dispuesta a ser la típica mujer sumisa y se niega a participar,  aunque poco puede hacer estando inmovilizada. En un momento de desesperación, Jessie le da a Gerald un par de patadas y el dolor provoca que él caiga fulminado debido a un paro cardíaco.

Una vez más, ya no sé cuantas van, vuelvo a hacer relectura. Esta vez me hacía una especial ilusión ya que se trata de mi libro favorito de King, mi top 1. Hace casi 30 años que lo leí y temía que mi opinión pudiese cambiar para mal, pero no ha sido así. A pesar de la cantidad de años que han pasado, me ha gustado igual o más que la primera vez.

¿Quién es capaz de escribir un librazo como éste con un solo personaje? Pues el maestro King. En cuanto empiezas a leer ya sabes que la cosa se va a poner bastante "chunga" y no tienes ni idea de cómo se va a desarrollar todo ni cual será su desenlace. A cada momento iremos descubriendo la infancia de Jessie a través de la cantidad de flashback que hay en todo el libro y nos iremos dando cuenta del gran trauma que tiene hasta su edad madura por un suceso que ocurrió y que nunca pudo olvidar. Un suceso que provocará que se nos revuelva el estómago.

"La locura constituiría un alivio, pero la locura no se presentaría. Ni el sueño. La muerte podía batir a los dos y, desde luego, la oscuridad también".

Aunque Mr.King no es uno de mis favoritos, esta novela me pareció impresionante; transmite angustia, miedo, desesperanza... Lo leí hace años y aún recuerdo lo que sentí al leerlo. Libro de terror que juega con nuestros miedos poniendo a la protagonista en una situación límite.

🔑 Aunque me duela decirlo, este libro me ha decepcionado bastante y a pesar de que no he leído mucho de King, tengo que decir que este ha sido el que menos me ha gustado por ahora.

🔑 El planteamiento inicial es bueno, con un giro que si no has leído la sinopsis como yo, te sorprenderá. A partir de ahí King empieza a describir la situación con todo lujo de detalles, lo que hace que te metas de lleno en la historia y en la piel de Jessie. El problema viene cuando la trama no avanza, hay páginas y páginas de descripciones, muchas de ellas repetitivas, que lo único que hacen son desesperarme (posiblemente era lo que buscaba King y conmigo lo ha conseguido).

🔑 Tanto la parte del eclipse, como la parte final son las que más curiosidad me dieron y me animaron a seguir leyendo, porque hubo algún momento que me planteé abandonar. También es verdad que esas partes para mi no encajaban mucho con la trama y podían dar más juego en otra novela.

🔑 A pesar de ese momento tan visual, que no diré más para no entrar en spoilers, me faltó acción y me sobrarón páginas en este libro.

🔑 Ahora como con la mayoría de obras de King, me toca ver su adaptación cinemátografica y valorar si es fiel o no al libro.
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Este libro es pura tensión y miedo.
Cada página que lees, parece que el corazón se te va a salir del pecho viviendo la propia angustia de la protagonista, aunque es un poco raro cuando lo lees, pero al final te enteras de todo.
Libro que hace King, libro que mejora al anterior, el maestro del terror puede con todo.
Lo recomiendo

Una historia difícil de digerir, y no por lo fantástica o aterradora, por lo tediosa e intrascendente. Admito que pocas veces me he topado con libros de Stephen King que me aburran tanto como El Juego de Gerald; si bien la historia no es mala, la manera cómo el autor la presenta hace que sea aburrida al sumergir al autor en infinidad de diálogos y recuerdos que no aportan a la historia.

¡Por otra parte está el “HOMBRE DE LA LUNA” o “VAQUERO DE LA LUNA” … o lo que sea! El personaje más innecesario jamás creado; con infinidad de potencial, pero absurdamente desperdiciado.