No es un libro que se caracterice por los sucesos paranormales o de miedo pero que sí que consigue que te angusties. Es inevitable pensar: “si me hubiese pasado algo así, no sé que hubiese hecho...” Quizás lo recomendaría para empezar en el universo Stephen King, ya es de fácil lectura (sus 600 páginas se me pasaron volando). En todo lo demás me parecía un poco una mezcla entre los niños de Stranger Things y la segunda temporada de American Horror Story (Asylum). Me quedé con este diálogo: “¿Sabe una cosa, Jamieson? Esta vida que creemos vivir no es real. No es más que un teatro de sombras, y personalmente me alegraré cuando se apaguen las luces. En la oscuridad, todas las sombras desaparecen.” |