Cujo resulta una historia trepidante en la que conocemos las desdichadas vidas de dos familias diferentes: los Trenton y los Camber. Stephen King consigue mantenerte pegado a cada página, deseando saber qué va a suceder a continuación. Es un libro que, he de decir, no tiene demasiado giros de argumentos. La historia es lineal, intercalando el punto de vista de los personajes principales. A pesar de ello, nos brinda una sensación de intriga, del "qué pasará ahora", esperando que todas las elucubraciones que el lector ha ido entretejiendo en su mente sean, o no, realidad. Pese a tener casi 500 páginas, es una lectura muy amena. La recomiendo mucho. |