El árbol desnudo

Uno de mis propósitos de año nuevo fue leer más literatura asiática. Y creo que ha sido un fantástico comienzo.

La autora de esta novela gráfica ha querido expresar el sentir de los supervivientes de la guerra de Corea. Es la historia de todos los jóvenes y artistas con sed de vivir en una ciudad asolada por la guerra.

No recuerdo haber leído sobre la guerra de Corea y eso ha sido un plus. Tenía muchas ganas de leer esta novela gráfica pero me ha faltado un poquito de más contenido al final del libro para que lo haya podido disfrutar totalmente. Entiendo que es una adaptación a la obra de culto de la literatura coreana y que por tanto, ha de ser menos extensa. Pero el final me ha parecido precipitado, en cambio (desde mi punto de vista) hay demasiado guión al principio que es circumstancial.

No es una novela gráfica que le recomendaría a todo el mundo, porque es dura y nada cómoda de leer. Pero creo que sí te interesa la historia y todo loque todavía hoy en día están padeciendo los habitantes de Corea, es un buen comienzo.

Las ilustraciones expresan a la perfección cada sentimiento de los protagonistas y así se transmite. Hay citas que me han gustado muchísimo y que me han hecho pensar. Valoremos más lo que tenemos porque hay países que están en guerra, aún todavía en el siglo XXI.

«Durante toda la creación de esta obra sentí pena y dolor por toda aquella gente que vivió esa época agitada. Tantas vidas desperdiciadas, tantas familias rotas. Pero esto también me confirió el ímpetu y el valor necesarios para dar forma a un proyecto nuevo que significaba mucho para mí desde hacía tiempo acerca de las «familias separadas» por la frontera norte-sur».
Keum Suk Gendry-Kim (2019).

En primer lugar quiero dar las gracias a Babelio y a su masa crítica por darme la oportunidad de leer esta magnífica novela.

Una novela gráfica basada en un clásico de la literatura surcoreana. Una historia basada en hechos reales vividos por la escritora.
En cualquier idioma y en cualquier país las guerras no son buenas para nadie, todo el mundo sufre. En este caso, aparte de transcurrir la historia durante la guerra civil de Corea, la autora nos cuenta muchas más cosas: la culpa, el miedo, la pena, el hambre, la desidia, el amor.
Una novela con pocos personajes pero muy bien definidos. Aunque es una novela gráfica y, como la misma ilustradora indica, refleja las partes que más le gustaron de la novela, se define claramente todo lo que la novelista quería reflejar.
Me ha gustado mucho la historia y me ha dado ganas de leer la novela para conocer más en profundidad la vida de la autora y datos sobre la guerra civil de Corea que, aunque sólo duro treinta y seis meses en los años cincuenta, ha mantenido la separación para siempre de las dos Coreas. Un acontecimiento que ha sido olvidado y eclipsado por otros acontecimientos históricos.

Wow. Qué historia tan triste, conmovedora y retrato terrible de lo que es una guerra para la sociedad, con pasajes para enmarcar y prevenirnos sobre cometer los errores del pasado. Me ha encantado y siento que es una de esas novelas gráficas que debe leer más gente y ser mucho más conocida de lo que es.

Al terminarlo, me han dado unas ganas increíbles no solo de leer más sobre la Guerra de Corea del Sur (¡Qué poco nos han hablado de ella!), sino también de leer el libro sobre el que está basado esta novela gráfica. Como toda novela gráfica, es una adaptación de lo que "más impactó" al escritor sobre la novela, así que me gustaría leer este clásico surcoreano para ver en qué temas profundiza. Además, me ha enamorado la historia del artista...