Un adolescente judío será enviado a los 14 años en un campo de concentración; sobrevivirá, pero será testigo de todos los horrores imaginables. Toda la narración baña en un tono despegado y al mismo tiempo muy descriptivo, sin tomar una opción; a tal punto que, in fine, la cosa molesta. Se puede decir que su supervivencia es posible gracias al poderoso entresijo de la amistad. |