 |
Lo bueno de esta saga que ha creado Kenyon es que los libros se pueden leer independientemente de un orden, si, tienen un orden, pero se pueden empezar a leer por cualquiera, también debo recalcar la increíble personalidad y trasfondo que envuelve a sus personajes, a los cuales siempre acabo recordando y me emocionan en algunos momentos de sus libros, ya sea por el dolor que están pasando o contagiarme la alegría de estos. Esta es la historia de Wulf y Cassandra, cazador oscuro y apolita, por ende no deberían estar juntos, pero en este libro se nos da una justificación bastante buena para que ello ocurra y como no, siempre tendrán aliados y enemigos en el libro, por que si no, no seria una historia interesante. No sabia casi nada de ellos, ya que solo se mencionaron un poco en El diablo puede llorar, la historia de Katra y Sin. Así como ellos son nombrados ahí, Katra juega un papel importante en este libro, siendo la guardiana de Cassandra. Otra pareja de la que estoy deseando saber más es de Urian y Phoebe, aunque han salido poco, por libros predecesores, se como es Urian y lo mucho que quería a su esposa y en este libro se ha notado aún más su amor. Debo resaltar que, aunque no te leas los libros en orden, Kenyon tienen en cuenta que eso puede pasa, y te explica los términos de nuevo para que no te pierdas en su mundo, es un gran punto a favor para ella. Como siempre, ha sido una delicia leer uno de los libros de una de mis autoras favoritas, y la verdad es que la pareja de Wuf y Cassandra me ha gustado mucho y como siempre el humor nunca ha faltado a pesar de estar en las peores partes. Espero continuar con esta saga cuanto antes, aunque sea salteado, por que en cada libro me sorprendo aún más. |
>
