Unas de las maravillas de la lectura es que nos permite conocer lugares, historias y sobre todo, personas reales. Gracias a este libro conocí a Agnes Magnusdottir: la última mujer decapitada en Islandia. Las delicadas líneas escritas por Hannah Kent me transportaron al siglo XIX de forma fluida, me permitieron ir descubriendo poco a poco las causas que originaron su terrible condena. La vida de Agnes, su entorno y sus necesidades pasaron frente a mis ojos de forma conmovedora. La autora realiza un muy buen trabajo recreando aquellos duros paisajes de Islandia y sobre todo le da voz a una mujer que buscaba ser escuchada mientras buscaba su paz interior. Un libro muy bien escrito que no te dejará indiferente. Escucha a Agnes como yo lo hice y acompáñala sus últimos días. Pd. Gracias Marenpergamino por la recomendación. |