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La trama es muy ágil y adictiva. Nosotros en la luna nos cuenta la historia de nuestra protagonista, Ginger, una chica británica que tras la ruptura con su novio Dean decide comprar un billete y marcharse a París por un día. Cuando llega y, mientras se pelea con la máquina de sacar billetes de metro, conoce a Rhys, nuestro otro protagonista. Un americano aventurero y DJ, que ayudará a Ginger a que ese día en París sea inolvidable. al día siguiente al despedirse en el aeropuerto, Ginger se da cuenta que no quiere perder el contacto con Rhys, ese chico tan alocado que ha conocido y le da su e-mail para no perder el contacto. Y ahí, es donde comienza esta maravillosa historia. Lo más original y lo que más me ha gustado han sido los e-mails. Hay capítulos que son al completo sobre los e-mails que ellos se escriben, haciendo que pase el tiempo del primero al último. A mi me aparecido una forma muy sencilla de conocer a los protagonistas, adentrarse en sus conversaciones y entenderlos mejor. Los capítulos por lo general son cortos y eso hace que sean muy ágiles y adictivos y te leas el libro sin darte ni cuenta. Hay capítulos de unas 10 páginas pero también hay capítulos de 2 y hace muy ligera la lectura. Están narrados por los 2 protagonistas, alternadamente. Los personajes son una maravilla, todos ellos. Ginger, que decide hacer una locura; viajar sola a París y aventurarse sola a vivir esa experiencia, es que me encanta. Es maravillosa y ya está jajaja. Desde el primer momento en que la conoces es súper fácil empatizar con ella y con su personalidad tan alegre y habladora. Es un personaje muy bien cuidado y desarrollado que cualquiera puede verse reflejado en ella. Además a medida que avanza la historia se nota muchísimo el desarrollo y crecimiento del personaje debido a todo lo que tiene que ir pasando en su vida y sobrellevando. Luego tenemos a Rhys, quien, debido a su trabajo como DJ, viaja constantemente y no tiene una residencia fija ni una vida asentada, todo lo contrario a Ginger. Este personaje, al igual que Ginger, me ha parecido realmente una maravilla y ha conseguido robarme el corazón durante todo el libro. Me he reído, he sufrido, disfrutado y llorado un montón de veces con él a lo largo de la historia y por eso me ha encantado su personaje porque he conectado y empatizado enseguida con él. Su desarrollo a lo largo del libro, al igual que Ginger, se nota muchísimo. |
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