La primera sorpresa me la llevé nada más abrirlo y comprobar la efectividad con la que su maquetación te mete dentro del sentimiento general de la obra. Ilustrado, con páginas en negro y páginas en blanco que dividen los cuatro capítulos de los que se compone: El daño, el amor, la ruptura y la cura. Y se nota muchísimo por el tono de los textos, que van pasando desde los temas más oscuros a los mayores brotes de felicidad... ella misma nos lo define: "Un poemario sobre amor, pérdida, trauma, abuso, curación y feminidad". Y yo añadiría que es un libro muy directo, que no se va por las ramas ni siente vergüenza al encarar temas como la menstruación femenina o la violación. En definitiva, un millar de sentimientos perfectamente expresados y bastante correspondidos con los sencillos trazos que los acompañan. Las ilustraciones son tan solo líneas, aunque es justo eso lo que hace que funcionen y jamás protagonicen la página por encima de la fuerza que contienen sus letras. A medida que avanza la lectura descubrimos que todos los textos sangran. Es decir, todos nos están descubriendo una realidad muy intensa y en su mayoría dolorosa, incluso cuando habla de amor. Todo supone una entrega absoluta a experiencias que asustan o ya hicieron daño. La presencia de las cicatrices del pasado es constante, atenazando la esperanza de unos textos y ensombreciendo otros. Y vuelve la página en negro. Vuelve el vacío. Aparece un nuevo dolor y la urgente necesidad de ponerle fin, el auténtico propósito del libro. Diagnostica todo tipo de dolencias y las acalla. Rupi Kaur se abre para los dolientes en éstas páginas, Casi es como si dijera "Yo he pasado por todo esto y sigo en pie, así que si yo he podido, tú también". El hecho de que éste libro busque reforzar nuestro autoestima y animarnos a dejar atrás nuestros miedos ya es suficiente para que lo recomiende. Tanto si has pasado por un infierno como si aún estás en él, hay versos para ti. El prólogo corre a cargo de Elvira Sastre, quien también ha sido la encargada de traducir la obra y he de decir que yo he quedado muy satisfecha con el resultado (Y eso que traducir poesía no es tarea fácil). El epílogo, por su parte, lo escribe la propia Rupi Kaur y es un agradecimiento poético a todos los que llegamos hasta el final de su poemario. Como curiosidad, Rupi Kaur saltó a la fama gracias a un proyecto universitario de nombre "Period" donde, a través de fotografías, representó de manera explícita lo que realmente es la menstruación para una mujer. El proyecto fue un rotundo éxito, aunque instagram decidió censurarlo. Rupi decidió volcarse en el dibujo y la escritura como métodos para curarse de todo lo que la atormentaba, y así es como éste primer poemario vio la luz. Enlace: http://elcuervodealasrotas.b.. |