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Yumeko, una medio humana-medio kitsune (zorro) se verá envuelta en un gran problema. Su templo ha sido arrasado por unos demonios y ella deberá cuidar de su mayor tesoro, el antiguo pergamino sagrado. Kage Tatsumi un samurái oscuro del Clan de la Sombra tendrá como objetivo hacerse con ese pergamino. Sus caminos se cruzarán y deberán ayudarse mutuamente para hacer frente a esta gran aventura ¿Querrás acompañarles? Este libro nos transporta completamente a una aventura típica de los animes, a mí me ha recordado muchísimo a Inuyasha, en donde capítulo tras capítulo nos aventuramos en un nuevo desafío. Es una novela tan fantástica y especial, me ha removido muchas cosas porque me sentía atrapada en ese mundo del anime. Los personajes son maravillosos, mi favorita es Yumeko que aporta ese pequeño humor con sus jugarretas. También me ha gustado mucho que la autora nos obligue a usar el mapa, porque hay veces que siento que los libros no dejan que nos invada la curiosidad para investigar donde están los distintos lugares y aquí eso está presente. Y encima el final…. MADRE MÍA, increíble, te dejará con ganas de coger el segundo libro. Es cierto, que encuentro que el principio es bastante lento cuesta coger el ritmo, además a la autora le gusta mucho describir los lugares, el entorno y entonces debo reconocer que eso a veces me cansaba, pero bueno no dejaba de ser algo también importante para hacerse una idea de cómo es este maravilloso mundo. |
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