El alma de la espada: La sombra del zorro 2

Hakaimono ha despertado. Libreado de la espada mata demonios conocida como Kamigoroshi, ahora controla el cuerpo de Tatsumi. Generando caos allá por donde va, Hakaimono tiene sed de venganza, de ir contra el clan de los Kage y, así, devolverle de manera sangrienta todos los años que ha estado recluido y avergonzado sin apenas poder en una espada. Mucho ha cambiado el mundo desde que Hakaimono era libre y la historia no perdona. Sin embargo, está dispuesto a volver a ganarse el título de uno de los demonios más poderosos y temidos y, para ello, necesita desesperadamente destruir a Kamigoroshi para evitar volver a ese dichoso espacio. Por su parte, Yumeko está destrozada. Perder a Tatsumi ha sido un golpe duro, aunque la misión de devolver el trozo de pergamino al Templo de la Pluma de Acero sigue en pie. Acompañada por su peculiar grupo, formado por un noble, un ronin, una sacerdotisa, dos perros guardianes y un sacerdote, pronto descubrirá que todavía hay grandes pruebas y retos esperando en su camino. Librear a Tatsumi pronto se vuelve una necesidad, conseguir, de alguna manera, separar a Hakaimono de su cuerpo para volver a encerrarlo. Pero dentro del clan familiar de los Kage hay dos vertientes, aquella que está dispuesta a darle a Yumeko lo que necesita para salvar a Tatsumi y aquellos que intentarán, por todos los medios, deshacerse de él. Cuando Yumeko averigua los verdaderos planes de Hakaimono, un reloj se pondrá en marcha cuenta atrás. Porque si Yumeko no llega a tiempo al Templo de la Pluma de Acero, todo su mundo, tal y como lo conoce, podría destruirse para siempre. Y, cuando desde las sombras acecha un poder mucho más retorcido y oscuro, las decisiones desesperadas serán la última salvación.

La sombra del zorro fue un libro que me encantó de principio a fin. Ambientada en un Japón feudal, repleto de clanes, familias poderosas y samuráis, me gustó muchísimo la vida que Julie Kagawa le dio a la mitología y folclore del país nipón. Creo que creó un libro adictivo, entretenido y muy interesante, donde empaparse de las creencias japonesas era parte de la magia de la historia. Así pues, El alma de la espada llegaba como una segunda parte que me iba a dar nuevas cosas y un poco más de todo esto, pero finalmente no lo he notado como un libro que explorara grandes cosas. Me ha gustado, ha sido una segunda parte satisfactoria pero que, sin embargo, no ha logrado captar o seguir la esencia de su primera parte.

Usando una narración en primera persona, Yumeko no será la única que narrará en esta ocasión, teniendo también a Hakaimono y, de vez en cuando, a Tatsumi contándonos parte de la historia, además de una invitada especial que, también, tendrá su papel protagonista en este segundo libro. Dividido en tres partes, la primera es una extensión de los últimos acontecimientos de la sombra del zorro, viendo las primeras consecuencias de la liberación de Hakaimono y la reorganización de todos los planes y misiones, ahora que la cosa se ha puesto un poco más complicada. Desde la primera página, se nota que El alma de la espada es un libro más pausado, dado a desarrollar mejor a los personajes y su destino después de todo lo ocurrido anteriormente. Las primeras páginas no se moverán demasiado, teniendo momentos pausados en los que ponerse en claro en lo que hacer, o no, será lo primordial. Poco a poco van saliendo cositas a lo que agarrarse, momentos algo más rápidos y más emocionantes, pero no llegan al nivel de todas esas batallas que, por ejemplo, tenemos desde el comienzo en La sombra del zorro. Sigue habiendo, en esta segunda parte, ese toque de peligro, de pensar que cualquier fallo, cualquier palabra o despiste, puede enfadar a la gente equivocada y meterte en un juego de vida o muerte. Es algo que se ha notado, que le ha dado a la lectura ese tono más urgente, más serio, más de estar atento a cualquier cambio. Creo que Julie Kagawa ha querido jugar a dos bandas en esta ocasión. Por un lado, darle a Yumeko la parte más sentimental, más emocional, más lógica. El pararnos a elaborar o matizar nuevos planes, el hacer sobresalir con ella nuevas partes de la ambientación, sobre todo concentrarse en una trama más razonable al tener que pensar cada movimiento de manera exacta y concreta. Se ha notado la separación de Yumeko y Tatsumi en el sentido de que Yumeko tiene la parte de la trama más monótona donde se va a tener que concretar el paso que se va a dar ahora. Por su parte, los capítulos narrados por Tatsumi y Hakaimono son los que han dado un soplo de aire fresco y ha conseguido que no nos quedemos estancados en una trama que, con Yumeko, parece no avanzar ni aportar gran cosa. Ambos personajes nos introducen de nuevo en ese mundo de demonios, ese mundo mitológico que tanto me enganchó y gustó, volviendo a esa estela de estar rodeados de la cultura nipona. Son estos momentos los que guardan escenas de pura acción, batallas sangrientas, juegos de miradas o juegos de inteligencia, pícaros, de engaño, entre diferentes personajes. de dejar creer a los demás que no eres nadie para dar el golpe final de manera inesperada. Se ha notado que la segunda parte empieza a coger un ritmo más vivo, todo lo que se ha planeado en la primera empieza a ponerse en marcha, donde la tercera y última parte estallará de manera inevitable en grandes enfrentamientos que tendrán de todo: sorpresas, apariciones estelares e inesperadas, giros en la trama, una lucha bestial y enorme que, además, sigue escondiendo sus propios secretos. Todavía queda mucho por pasar, es algo que ya en los últimos compases de la novela queda palpable y, con ese final, sabes que algo gordo está a punto de suceder y de llegar. El alma de la espada es un libro que se ha tomado su tiempo hasta llegar aquí, un desarrollo de personajes y de historia que se ha ido creciendo a medida que las páginas van pasando para darnos un final que nos deja con ganas de más y de querer leer ya el último libro de esta trilogía.

Si comparamos La sombra del zorro con El alma de la espada, se nota que hay un cambio de ritmo y de tipo de historia. Mientras que la primera era más vertiginosa, de tener muchos más momentos trepidantes en los que apenas nos podemos parar para descansar, en esta segunda, como digo, vamos a encontrar una trama más lenta y centrada en conocer otros aspectos de la ambientación que no dan tanto movimiento. El enfoque, en esta ocasión, está en el mundo político y de clanes que, desde el primer momento, sabemos que conforma esta sociedad. Aunque no se llega a explorar de manera profunda todos los tejemanejes que hay, las alianzas, las rivalidades y los apellidos familiares, algo que sí tiene El alma de la espada es la visión de uno de los clanes más importantes y más peligrosos que hay: los Kage. Ya en el primer libro, La sombra del zorro, tenemos conocimiento de este clan a través de Tatsumi. Pero aquí nos adentramos del todo en su territorio. Ha dejado cosas muy interesantes. Ver de qué manera funciona realmente el centro de una familia o clan ha sido bastante emocionante. Es lo que le ha otorgado al libro ese tono de preocupación o de peligro, el no saber por donde te puede salir un nuevo enemigo. Además, hay tensión, demasiada, algo que también ha sobresalido sin problemas a lo largo de la lectura para hacernos ver que, ni siquiera entre ellos, hay un lugar seguro. Sin embargo, esto también ha hecho que toda esa exploración del mundo mitológico se reduzca considerablemente. Aunque la parte de Tatsumi y Hakaimono, como he comentado, si nos ofrece ese escenario, ya no se nota de la misma manera. Aún así, El alma de la espada ofrece cosas nuevas, explora lugares diferentes, tanto en el mundo de los humanos como el que hay entre este y el de los demonios, dejando una segunda parte con sus propias características.

En conclusión, El alma de la espada es una continuación que se aleja algo del sentimiento que dejó La sombra del zorro pero que, sin embargo, sigue funcionando. Una trama mucho más pausada, en este libro nos enfocaremos en elementos nuevos y diferentes, algunos con muchas sorpresas, haciendo que todo este mundo del Japón feudal crezca por otro camino hasta tener un final de infarto con el que aún podemos colgar el cartel de ser una historia altamente recomendable.

Empecemos por el género de esta obra, a la cual la catalogaríamos dentro del género de fantasia y aventura. Es una historia que nos narra las aventuras de Yumeko y sus peculiares acompañantes a través de diferentes tierras y paisajes. Se nos mostrará una Japón feudal, dividida en clanes, con familias importantes y seres mitológicos sacados del folclore del país nipón.

Una obra repleta de datos mitológicos, con una muy buena historia bélica entre los clanes y una sociedad muy bien construida y explicada. Julie Kagawa nos mostrará un Japón feudal hermoso pero cruel, mágico pero tenebroso. Un libro en el que nos podremos adentrar en dicha ambientación sin ningún tipo de problema, ya que la autora no escatima en descripciones.

A título personal tengo que decir que amo la cultura asiática, veo muchos animes y leo muchos mangas y es por esto que considero este libro un anime escrito. Es una historia que perfectamente podría ver llevada a la televisión porque es el tipo de historias que se ven en este tipo de plataformas. Soy capaz de imaginar cada detalle que Julie Kagawa narra y eso es algo que tengo que agradecer a este amor que siento por dicha cultura.



En cuanto a la pluma de la autora solo puedo decir que se ha vuelto a coronar. Leí unas cien páginas el primer día y ayer me bebí las cuatrocientas que me faltaban, era un no parar y necesitar mas continuo. Julie Kagawa ha creado una historia maravillosa, llena de datos bélicos, históricos, mitológicos... pero sin llegar a resultar una lectura pesada o aburrida.

Desde la primera página hasta la última nos encontramos con una pluma ligera y ágil. Una narración un poco mas pausada que La sombra del zorro, pero a su vez mas atrayente y adictiva. Una linea argumental muy bien marcada y desarrollada que acompañada por su forma de narrar, produce que nos adentremos en su mundo en un abrir y cerrar de ojos.

En ningún momento llegas a sentir que lo que se nos narra llega a ser pesado, aburrido o innecesario. Todo lo que leemos está por y para una finalidad. No nos llegaremos a encontrar ningún tipo de relleno, todo lo que se nos muestra sirve para conocer a los personajes, verlos madurar o llegar a comprender sus motivaciones. Es por esto que tengo que reconocer que esta autora se ha ganado toda mi admiración.



En lo que respecta a la trama, tengo que reconocer que me ha encantado. Nos encontramos con una historia dividida en tres partes: En la primera se nos muestra la continuación de los sucesos acaecidos en La sombra del zorro, en la segunda la aventura de Yumeko y sus acompañantes en su camino hacia el Templo de la pluma de acero y en la tercera el gran desenlace de dicho viaje.

La trama está muy bien dividida y ordenada, todo lo que se nos cuenta es por un propósito y es por esto que tienes que quedarte con todos los detalles. Tengo que reconocer que quizás esta trama es un poco mas lenta que La sombra del zorro, ya que se trata de un libro que sirve de puente para el gran desenlace de la trilogía, pero a su vez tengo que decir que me ha encantado.

En esta entrega nos encontraremos con personajes mas humanos, mas reales. Conocemos datos que hasta este momento nos eran desconocidos y veremos desarrollarse ciertas relaciones que para nada esperábamos. También observaremos cierta evolución en nuestra protagonista Yumeko, quien irá dejando atrás su lado infantil e inocente para convertirse en una kitsune que pelea por y para los suyos.

Con todo esto quiero decir que aunque es un libro que sirve de puente para el libro final, no es un libro que se quede a medio camino. Disfrutaremos igual o más que con la primera entrega. Llegaremos a conocer a los personajes y sus deseos y ambiciones, entenderemos muchas cosas y a su vez nos enamoraremos de la narración.



Por último en lo que respecta a los personajes tengo que decir que estoy enamorada de todos ellos. En esta nueva entrega veremos a varios personajes narrando en primera persona: la propia Yumeko, Hakaimono, en algunas ocasiones a Tatsumi y un personaje de la primera entrega que será muy importante.

No quiero hablar mucho sobre los personajes porque no quiero soltar ningún spoiler, pero tengo que decirlo vaya relación de amor que se ha sacado de la manga Julie Kagawa y cuanto la he amado (no voy a decir quienes son estos personajes para dejaros con la intriga). Es algo que no me esperaba y que me ha sorprendido y gustado a mas no poder, todo un acierto de principio a fin.

Dejando de lado esta maravillosa relación, quiero hablar de la relación de amistad y lealtad que hay entre los personajes. Es una relación tan bonita, tan pura que acabas queriéndolos a todos. Lo mas bonito de esta relación es que cada personaje pertenece a una raza distinta o diferentes status sociales pero no se dejan llevar por estas convicciones y se profesan una lealtad muy profunda y bonita. El grupo de amigos que ha creado Julie Kagawa es precioso y digno de admiración.



En conclusión, es una historia que me ha tenido enganchada desde la primera hasta la última página. Que no me ha podido gustar más y que sirve como puente maravilloso para la siguiente entrega. Una segunda entrega de diez que recomiendo a todo el mundo que se leyó la primera parte. Si no te has leído esta trilogía y amas la cultura oriental, no sé a qué estás esperando.

Hace unos meses os traía por aquí la reseña de “la sombra del zorro”, la primera parte de esta trilogía. Y por cierto, os recuerdo que me encantó.

La historia nos presenta una trama que se desarrolla en el Japón feudal dónde emperadores y samuráis campaban a sus anchas por el mundo. Pero, ¿y si a esto le sumamos ese mundo espiritual de onis, yokais y criaturas fantásticas típicas del folclore japonés? ¿Y la lucha por un pergamino mágico capaz de cumplir cualquier deseo, poniendo con esto al mundo que conocemos en peligro?

Sin duda es una premisa de lo más interesante. Una aventura llena de acción dónde no hacen más que ocurrir una cosa tras otra. No te da tiempo a aburrirte. Y como no, el final es de infarto.

En este segundo libro, empezaremos justo donde lo dejamos. Tras la repentina posesión demoníaca de Tatsumi, nuestros personajes se sienten desorientados. Han perdido a uno de los suyos y no han podido más que mirar, sin poder hacer nada para ayudarle o liberarle de Hakaimono, el demonio que vivía dentro de su espada y que ahora controla su cuerpo. Tendrán que decidir si salvar a su amigo o continuar con la misión que hizo que sus caminos se juntasen. Llevar el trozo de pergamino del dragón al templo de la pluma de acero e impedir que caiga en malas manos, es lo primero.

Comparándolo con el desarrollo del primer libro, está segunda parte juega más un papel de enlace o puente. Nos prepara y sirve de transición para lo que nos esperará en el volumen final. Habrá menos momentos de acción y nos centraremos de lleno en los personajes.

Les conoceremos más a fondo. Viendo cuáles son sus motivaciones, cómo estas les ayudan a continuar el duro camino que les ha tocado seguir. Será un libro en el que habrá que tomar decisiones importantes. de las que no se podrán volver atrás después.

A pesar de ser un planteamiento algo distinto a lo que vimos en “la sombra del zorro”, la historia continua siendo de lo más adictiva. El libro continúa estando narrado a varias voces.

Y si antes esto servía para conocer mejor los puntos de vista de los personajes, ahora sirve para crear varias subtramas dentro de la historia principal.

Nos centramos, sobre todo, en los personajes de Yumeko y Hakaimono. Cada uno seguirá un camino distinto. Yumeko buscará cumplir su misión llevando el trozo de pergamino al templo de la pluma de acero. Hakaimono decide liberarse completamente de sus ataduras y la maldición de la espada.

Literalmente no puedes parar de leer durante toda la lectura. Te mueres de ganas de saber qué pasará con los personajes, como todas las subtramas serán capaces de enlazarse entre sí. Os juro que cuando llega ese momento en el que todo el mundo se junta, es imposible no emocionarse. Es como si estuvieras viendo una película.

La autora describe lo justo. Utiliza un lenguaje sencillo, lleno de palabras típicas de la cultura japonesa. Gracias a esto, logras adentrarte del todo en esta ambientación volviéndote uno más. Y lo mismo ocurre con los yo-kais y los seres mágicos. Cómo describe sus habilidades y sus poderes, es como si los vieras.

Sobre el romance, seguiremos viendo como la relación entre Yumeko y Tatsumi se desarrolla. Volviéndose cada vez más estrecha. Me encantan las relaciones entre estos dos personajes. Como siempre piensan el uno en el otro de una forma tan profunda. Sin miedo a tener que sacrificarse.

No habrá tantos momentos románticos y dulces como en el libro anterior. Pero sí que nos encontraremos con una sorpresa inesperada. Una pareja nueva que por cierto no me esperaba para nada. Tengo ganas de ver cómo se desarrolla esta nueva relación.

Sobre la parte final, deciros que estará llena de acción. Serán casi los únicos momentos de acción que encontraremos en el libro. Ahora sí, ya os aviso que por esa intensidad y esa tensión qué Julie Kagawa nos mete en el cuerpo, merece mucho la pena esperar. Será un tramo donde no sabes que es lo que va a ocurrir. Y, pasarás miedo al pasar las páginas una tras otra, sin poder parar.

El final, como no, me ha llenado de ganas por leer ese último libro. Estoy segura de que va a ser un no parar. Conociendo a la autora, me espero momentos llenos de acción que me podrán el corazón en un puño.

Sobre los personajes, deciros que si en el primer libro me encantaron, aquí me han gustado incluso más.

El equipo que forman todos juntos es genial. Cada uno con una personalidad y unas habilidades únicas, que les vuelve especiales y diferentes a los demás.

El personaje de Yumeko seguirá evolucionando. En esta historia veremos cómo usa su magia de zorro y las consecuencias que esta puede ocasionar en su entorno. Me encanta la fortaleza y la fuerza interior que muestra este personaje durante toda la lectura. Nunca se rinde. Siempre sigue adelante por muy dura que sea la situación.

Tatsumi aparecerá menos. Pero gracias a eso, podremos conocer algo más a Hakaimono, ese demonio al que solo pudimos escuchar anteriormente a través de la espada. Es un personaje que se vuelve más interesante conforme vas avanzando en la trama. Sobre todo por el gran contraste que crea cuando lo comparas con el resto de personajes. Demuestra frialdad y locura, frente a la comprensión y cercanía de los demás. Características qué albergan los verdaderos monstruos.

En conclusión, “el alma de la espada” es una lectura que continúa la historia con un planteamiento más pausado y profundo. Pero, no por ello menos interesante. En cuanto llevas unos pocos capítulos, coges un ritmo trepidante, no puedes parar. Las tramas van corriendo de forma independiente y cuando estás se juntan, el mundo arde. Llega la acción y el pasar una hoja tras otra, hasta llegar a un final de infarto que te pide a gritos que te hagas con el siguiente libro cuanto antes.

Si os gustan las historias de aventuras llenas de acción, con personajes inolvidables a los que es imposible no cogerles cariño, os recomiendo esta trilogía. Tenéis que leer estos libros. Son una verdadera joya.
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Hakaimono se ha liberado al fin de la espada que era su prisión. Ahora busca vengarse del clan de los Kage, los responsables de su cautiverio y romper la maldición que le vincula con Kamigoroshi. Para ello utilizará el cuerpo de Tatsumi, el portador de la espada. Mientras tanto Yumeko intenta llegar al Templo de la Pluma de Acero para entregar el fragmento del Pergamino de las Mil Oraciones. Durante su viaje la joven kitsune no olvida a Tatsumi e intenta urdir un plan para intentar vencer al demonio y traer de vuelta a su amigo. Pero esto no será nada fácil ya que nadie en la historia ha sido capaz de vencer al gran oni. ¿Será capaz Yumeko de lograrlo?

Esta segunda parte me ha gustado mucho ya que la historia no decae en ningún momento. Lo que más me ha gustado es conocer más en profundidad la ambientación que ha creado la autora. En esta ocasión descubrimos el Bosque de los Mil Ojos, el Templo de la Pluma de Acero y otro lugares del reino de Iwagoto. También me encantó seguir conociendo a distintas criaturas típicas del folclore japonés, la verdad que he descubierto un montón de onis o demonios y espíritus gracias a este libro. También me gustó conocer más sobre la magia kitsune y ver que iban más allá de las simples ilusiones o engaños. En cuanto a los personaje decir que me siguen encantando todos. En relación con esto decir que me gustó mucho conocer más en profundidad a Hakaimono ya que en el primer libro apenas sabíamos gran cosa de este gran oni. También me gustó la aparición de Genno como nuevo villano del libro, me pareció una gran incorporación para la trama de la trilogía. La pluma de la autora me sigue encantando es muy fluida y ágil y hace que te enganches a a lectura desde el primer momento. Los capítulos están narrados por diferentes personajes, así tenemos capítulo narrados por Yumeko, Hakaimono, Tatsumi y por Suki. El final me gustó mucho y estoy deseando leer la tercera parte para ver como finaliza esta historia.

En definitiva un libro que disfrutaréis mucho si sois amantes de la cultura japonesa o si os gustan los libros de fantasía.

Con Hakaimono libre y buscando romper la maldición que le une a la espada Kamigoroshi, Yumeko no solo tiene que cumplir la misión de llevar su parte del pergamino al Templo de la pluma de acero sino que, también quiere salvar el alma de Tatsumi, el guerrero de los Kage que le ayudó durante la primera parte de su viaje. Pero las fuerzas del mal se están reuniendo y la amenaza del deseo del dragón pone en peligro a todo el imperio.

Esta segunda parte puedo decir que me ha gustado tanto como la primera. Por un lado tenemos a Yumeko y al resto de la comitiva que se le había unido en el anterior libro, haciendo frente al debate de si llevar la parte del pergamino al Templo de la pluma de Acero o demorarse en buscar una salvación que libere a Tatsumi de la posesión del general de los demonios. Y por otro lado tenemos a Hakaimono, que busca la manera de liberarse de la maldición de la espada de los Kage. Aunque hay un tercer hilo argumental, en el que vemos a Segeitsu-sama, un misterioso hombre que parece que maneja los hilos del destino aunque no sabemos con qué propósito. Lo que más me sigue gustando de todo el libro son las referencias al folclore asiático, a los yokais. Durante el libro aparecen numerosas criaturas sobrenaturales, algunas que ya conocíamos pero otras muchas nuevas, lo que me ha fascinado y repugnado en algunas ocasiones a partes iguales. Otro punto positivo del libro es la ambientación que es muy rica y que hace que te sumerjas por completo en la lectura. Además de la pluma de la autora que me sigue encantando ya que no duda en describir algunas situaciones de una manera casi poética y en otras describir batallas sangrientas sin que le tiemble el pulso. En cuanto a los personjes he de decir que me siguen encantado todos, aunque la mayoría siguen siendo los que ya conocíamos. Solo destacaré a Yumeko ya que sufre una gran evolución con respecto al primer libro. Es más madura y más consciente de sus poderes como Kitsune, aunque sigue siendo igual de abnegada ante la personas que le importan. También me ha gustado conocer más a fondo los planes de Hakaimono y su personalidad, así como descubrir a Genno, un nuevo villano que me ha fascinado. Representa muy bien la figura de lo qué le pasa al ser humano cuando el mal y las ansias de poder dominan. Ser capaz de vender tu alma y aliarte con el mal solo para ponerte una corona en la cabeza. Como único punto negativo diría que hay una cosa en la trama que me pareció muy forzada y me costó digerir, no diré mucho ya que no quiero hacer spoilers, solo diré que es relativo a la trama romántica. En cuanto a la narración decir que hay capítulos narrados desde diferentes puntos de vista, principalmente desde Yumeko y Hakaimono pero también hay algunos desde la perspectiva de Suki y de Tatsumi. Por último solo diré que el final me encantó y que necesito leer el desenlace de esta maravillosa historia.