Candela

Juan del Val no me ha decepcionado en demasía, porque no esperaba nada de él. al contrario, lo he leído casi de un tirón y sin ser nada del otro mundo, lo he disfrutado. He empezado a leer el libro al azar, sin ninguna referencia ni crítica leída al respecto. No esperen al leerlo reflexión, pensamientos místicos ni nada por el estilo, ni profundizar en ella más de lo que es. Solo leerla y disfruten. Simplemente se lee...se lee en un lenguaje coloquial, lenguaje de personas de barrio,personas normales y corrientes con situaciones de la vida cotidiana. No me ha encantado, pero tampoco me ha disgustado. de hecho, alguna sonrisilla me ha salido al leer alguna situación rocambolesca..jeje. Sirve para desconectar y pasar un rato sin tener que pensar en nada, solo en las situaciones que nos detalla. Fiel reflejo de la vida cotidiana de posiblemente millones de personas. Es recomendable para leer entre libros más serios y poder desconectar y si encima te saca alguna sonrisa, pues eso que te llevas.

Primera novela que leo de Juan del Val y la he disfrutado.

Candela es una historia sencilla, narrada en primera persona por la propia Candela en la que nos detalla su día a día de su vida vulgar y corriente.

No obstante, Juan del Val nos cuenta, con ese lenguaje ligero y entre líneas una historia profunda. Es una de esas novelas que sin contar nada dicen mucho.

Personajes normales a los que les suceden cosas buenas y malas pero que, narradas por nuestra protagonista, con humor, descubrimos lo que para unos puede ser un drama y para
Candela es su vida.

Sin embargo no hay que confundir humor con una novela frívola. Candela es tierna y emotiva. Es la vida de una mujer sencilla que, protegida y apoyada por sus familiares y amigos, ha vivido bastante bien y que, en su madurez, se encuentra a sí misma y decide sobre su vida.

Galardonada con el premio Primavera del 2019, Candela es una lectura rápida que deja una sonrisa al lector y una sensación de que los personajes con los que has convivido podrían ser algunos conocidos tuyos.

Cuenta en primera persona la historia de Candela, una chica de 40 años que vive sola con su perrita Chelo y que trabaja en el restaurante familiar junto a su madre, su abuela y varios empleados más que ya son como de la familia.
Una chica acomplejada e infeliz hasta que tras una serie de sucesos trágicos, consigue cambiar su mente y tomar la riendas de su vida.

Una historia de fácil lectura, en la que destacaría el humor y la autenticidad de algunos de sus personajes.
Es la primera vez que leo a Juan del Val y es cierto que la historia no tiene mucha "sustancia" pero me ha gustado mucho, seguramente habrá más lecturas de este autor 😃

Con 40 años y una vida de lo más normal, Candela vive acostumbrada a la soledad. Ella es enormemente observadora y con un ácido sentido del humor. Sus días transcurren sin grandes sobresaltos mientras trabaja de camarera en el bar que regenta junto a su abuela y madre tuerta. Un bar de barrio en el que, a través de sus clientes, pasa la vida. Candela deberá alumbrar cualquier penumbra, incluso esa que vuelve desde el pasado que creía olvidado. 🎈

Una novela entretenida, fresca, de ágil lectura. Me he echado unas cuantas risas ya que tiene un toque de humor que hace que pases un buen rato. 🎈

Es el primer libro que leo de #juandelval y no va a ser el último. Gracias por hacerme finalizar con una sonrisa en la cara. 7/10

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¡¡Madre mia!!, que este libro se haya llevado un premio, me incita a pensar dos cosas:

1.- Si este es el premiado, como serán los demas... porque es malo con avaricia.

2.- ¿Quién del jurado es amigo del autor?.

Un libro como pocos de malo que es. No entiendo este premio a no ser me me vaya a la razón N'2. Querido Juan del Val, salir en Tv, en la radio y estar casado con una señora conocida... NO TE HACE BUEN ESCRITOR. Lo siento, que me devuelvan el dinero.. y a falta de eso, lo venderé en Wallapop.

¿Sabéis esa historia que cuando la acabas te deja con ganas de quedarte ahí y seguir viviendo con ellos? Pues así es Candela, donde no pasa nada pero pasa de todo.
¿Quién no tiene, debajo de su casa o en el trabajo, el típico bar de barrio en el que conocen a todo el mundo y lo regentan de toda la vida? Pues a mí me hubiese gustado quedarme allí a ver como continúan sus vidas...

Encasillada como costumbrista, creo que el autor ha conseguido sumergirte totalmente en la cotidianidad de la vida de Candela.

Escrita con mucho sarcasmo y humor, pero que también contiene momentos entrañables y duros, Candela nos cuenta su día a día entre lo personal y lo profesional, ligeramente unidos, y como pequeños encontronazos pueden cambiar el rumbo de nuestra vida.

“Candela” de Juan del Val ha sido la ganadora del Premio Primavera 2019. No conocía ningún trabajo anterior del autor, sólo sabía que era marido de la presentadora Nuria Roca y que había escrito con ella algún libro. A partir de hoy, seguiré más de cerca su trabajo, ya que “Candela” me ha cautivado.
Leyendo la sinopsis ya sabía que este libro me iba a gustar mucho, empieza así: “Tengo estrías, celulitis y una perra fea que se llama Chelo. al principio era bonita, pero cuando creció se le ensanchó el culo. Lo mismo que me pasó a mí, salvando las distancias…” Con esta premisa ya sabía yo que el personaje de Candela me iba a enamorar. Una mujer normal y corriente con sus defectos y sus virtudes (aunque ella se niegue a verlas)
Candela es una mujer de cuarenta años, ni guapa ni fea que vive con su perra Chelo. Regenta un bar de barrio junto a su abuela y a su madre “la tuerta” y no sólo es un mote, esque es tuerta de verdad y lleva un parche en su ojo ausente. Por su bar, El Cancerbero pasan casi todos los días los mismos clientes y su trato con ellos es como de la familia.
Leer este libro ha sido una maravilla. Contado en primera persona conocemos a Candela, a su familia y a su círculo más cercano. Es una mujer a la que la vida no la ha tratado demasiado bien pero su madre y su abuela lo ha compensado.
Narrado con un sentido del humor muy sano nos cuenta tanto anécdotas con las que me he reído a carcajada limpia como desventuras. Porque no todo lo que le pasa a Candela son cosas buenas, pero está narrado con un sentido del humor que hace que la lectura no se vuelva un dramón.
En resumen, leer Candela ha sido todo un acierto, me he reído, me he emocionado y en estas dos tardes que me ha durado el libro he sentido que Candela era como una amiga cercana a la que he querido y admirado. La recomiendo 100%

Libro que me ha sorprendido, por un motivo: es un libro en el que no pasa nada, o casi nada, pero no por eso podía dejar de leerlo.
Es un libro que se podría clasificar como narrativa costumbrista, en el que se describe el día a día de personas normales, en un barrio de Madrid, de la mano de la protagonista, Candela.
Candela es una mujer que ha superado los cuarenta, soltera, que vive con su perrita; muy cerca de su madre y de su abuela, junto a las que regenta un bar-restaurante de barrio, de los de menú diario, con sus parroquianos asiduos.
Además, nos describe la vida de tres mujeres que han tenido que valerse por si mismas y de las que, a lo largo de la novela, vamos descubriendo sus historias, los hechos que las han marcado y que las han convertido en lo que son en la actualidad.
La narración es muy amena, ágil, con toques de humor... pero también de pena y de desamor. Está narrado en primera persona, de la voz de la protagonista, por lo que todo lo que sabemos es desde su punto de vista y a partir de lo que ella misma conoce de su vida familiar. Descubrimos a su madre y a su abuela, lo que las inspira. Así como algunas de las relaciones sentimentales de Candela.
También conocemos bastante bien algunos de los clientes asiduos del local, como Fermín, un jubilado viudo que come cada día en el restaurante; como algunos policías de una comisaría cercana, con los que las tres mujeres tienen muy buena relación.
El autor también aprovecha para tratar algunos temas sociales, aunque pasando un poco de puntillas, como la vida de los inmigrantes, o como tirar adelante siendo madre soltera; y algunos otros que no puedo comentar para no desvelar la trama.

En este caso nos encontramos ante una novela costumbrista, de las que se leen de una sentada y de las que aunque parece que no pasa nada pasa de todo.

Me han gustado mucho algunos de los personajes del libro y lo mejor es el fiel reflejo que logra transmitir el autor sobre la cotidianidad de la vida misma.

Es una novela muy fresca y agradable que te narra la vida de Candela a partir de los 40. Pinceladas de su pasado, desarrollo del presente y su visualización de futuro. Gente cotidiana con sus emociones, miedos, angustias y la busquedad de la felicidad personal, esa que, a veces, dejamos pasar por circustancias de la vida o por no querernos un poquito más. Una lectura entretenida, sin grandes desafios.