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Paula es una niña de once años que vive con su madre en la ciudad. Paula está siempre enfadada, no le gusta que le digan lo que tiene que hacer y mucho menos que los demás no hagan lo que ella quiere. Rita, su madre, está muy preocupada, por lo que decide irse con ella a pasar unos días al pueblo donde creció, Us, donde viven su hermano Braulius y su perro Titán. Hace tiempo ocurrió algo que ambos saben y que creen que puede ser el origen del comportamiento de Paula, pues ella siempre había sido una niña buena y con un gran corazón. Confían en que la visita al pueblo sirva para que Paula deje atrás esa rabia y ese malestar que la acompaña siempre, pues contarán con la ayuda de algunos amigos. Pero hay un vecino al que Rita teme: no quiere que por nada del mundo se acerque a Paula, de nuevo… Durante toda la historia, vemos cómo su madre y su tío intentan una y otra vez hacerla entrar en razón, explicándole el valor de la amistad, del esfuerzo y de la constancia, y de saber disfrutar de las pequeñas cosas. Pero Paula no quiere escuchar, y siempre culpa a los demás de todo lo que le pasa. Los vecinos de Us, que son amigos de la familia, ayudarán a Braulius y Rita con el problema de Paula, pero Theodor ‘Lengua de Serpiente', un detestable personaje del pueblo, les complicará las cosas. Quiere aprovecharse del buen corazón de Paula para sembrar el odio en ella y en toda la comarca. Como conclusión, “La pequeña Paula” es una historia que me ha dejado una muy buena sensación al terminar de leerla, ya que está llena de valores, como son la amistad, el amor, el esfuerzo y la empatía, entre otros. Es una historia donde se mezcla la realidad y la fantasía, con personajes como el Hada blanca o Madre Tierra, y predomina la lucha entre la luz y la oscuridad. Creo que es un libro que deberían leer tanto niños como adultos, ya que estos valores son muy necesarios en la sociedad actual, donde a veces se nos olvida que los demás también sienten y que no somos el centro del universo. |
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