El año en que salvé a Einstein

Nada más leer el tútlo y ver la fotografía de la cubierta de esta novela, pensé que tenía que leerla. Albert Einstein es un personaje icónico, que ha trascendido del mundo científico al del conocimiento popular. Yo doy fe de ello, porque mi formación científica es prácticamente nula, y se conforma, básicamente, por cuatro datos inconexos conocidos por casi todo el mundo.


Aunque, a la hora de leerla tenía mis prejucios, acrecentados por el intento de leer "Contact" de Carl Sagan (hace muchos años y que me abrumó de tal manera con sus términos técnicos, que desde entonces rehuyo de casi toda la ciencia ficción, aunque poco a poco, intento que esto cambie, porque hay auténticas obras maestras de la literatura de éste género, y no me gustaría perdérmelas), tengo que decir que mi miedo era infundado y pude leer la historia sin ningún tipo de problema. Porque, aunque abundan los términos científicos sobre física y la historia de la misma y de algunos físicos eminentes, el autor lo hace de forma tan amena que vas aprendiendo muchas cosas sobre el tema y con gusto. Aunque tengo que decir, que al principio de la novela, se nota que el autor quiere dar mucha información, y hace que en los primero momentos de la lectura ésta esté metida casi con calzador, pero ésta sensación va desapareciendo y el escritor consigue que los datos que nos va suministrando se sientan bien integrados con la historia.

Es una novela histórica en la que predominan los hechos históricos como tal, no tiene mucha acción, pero sí la suficiente como para tener enganchado al lector y mantener el interés por el desarrollo de la historia.

En definitiva, es una buena novela, que gustará a los lectores de novela histórica y a aquellas personas interesadas por la figura de Albert Einstein y la física.