InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
>

Crítica de PilarLaEremita


PilarLaEremita
11 March 2020
Os voy a pedir que os retrotraigáis a vuestros tiempos del colegio, a aquellas clases de Historia en las que os hablaban del Imperio Romano. Da igual si no recordáis u os importaba un pimiento porque erais más de Ciencias... seguro que habéis leído o visto en el cine a aquel galo "bajo de tórax" llamado Obélix, que miraba a su pequeño compañero Astérix haciendo sonar su casco con los nudillos, mientras decía aquello de "Están locos estos romanos". Y los más puretas hasta habréis pasado tardes enteras con comics de El Jabato.

Lo que quiero decir es que a estas alturas todos hemos oído hablar de Roma, que, por si fuera poco, ha dejado incontables huellas indelebles por toda nuestra geografía (vamos, que das una patada en el suelo y te sale una ruina romana). Pero Roma cayó ¿y qué fue de nosotros los de Hispania? Los profes nos hacían pasar de puntillas por aquella época hasta llegar a los reyes godos. A nuestros abuelos les hacían aprenderse la lista; a nosotros por suerte no, solo aquello de que la península fue ocupada por hordas bárbaras de suevos, vándalos y alanos. Sin más.

¿Nunca os produjo curiosidad saber qué pasó en aquella laguna escolar histórica? Pues aquí llega José Zoilo Hernández para contárnoslo, no como en una aburrida clase, sino en forma de novela quasi-épica, de la mano de Attax, un alano semi-aculturizado de aquellos tiempos, en la primera entrega de la trilogía "Las Cenizas de Hispania".

Vamos con la Sinopsis:

Hispalis, año 438 d.C.: Ante la alarmante aparición de una horda sueva dispuesta a asolar sus tierras, Attax, un bárbaro alano, decide unirse al ejército de un viejo amigo para luchar por la defensa de su gente. La gloria que él espera, desaparece al ser hecho prisionero y vendido como esclavo.

Tras 11 años de servidumbre, Attax debe emprender una nueva vida tras el asesinato de su amo, con la compañía del hijo de este, Marco. Attax se sumergirá en un intenso viaje por la moribunda Hispania, que le llevará a comprender el valor de la amistad y el amor, así como el precio de perder ambos. Un recorrido hacia la madurez que despreció en su juventud.

Suevos, vándalos y alanos cobran vida en el escenario de una Hispania convulsa y decadente, abandonada a su suerte por un imperio romano que se desvanece.




Aunque la novela histórica es para mí la segunda opción en género, he disfrutado de esta lectura cual "chancho en charca". Tiene de todo lo que se le puede pedir a un libro para hacerlo redondo: acción, intriga, una gran narrativa (lo que mi dañado espíritu lector agradece sobremanera, ya lo sabéis), viajes, relaciones humanas, amor del cotidiano, y mucha, pero mucha guerra. Hablamos de un bárbaro, no lo olvidemos, de esos que llevan la batalla en la sangre. Y encima es didáctica.

Attax nos hace vivir La Historia a través de su historia, no la de un caudillo, un noble o un erudito como suele tenernos acostumbrados este género de novela, sino la de un habitante de a pié del crisol de culturas que fué, ha sido y quiera el destino (del que tanto le gusta hablar a nuestro protagonista) que sea nuestra tierra. Verdugo a veces y víctima otras; invasor e invadido. Viajamos con él desde su ardiente juventud hasta su más sosegada (que no menos guerrera) madurez en El Alano. Estoy deseando recorrer con él toda su vida en tiempos tan convulsos, que deduzco seguirá completa en los próximos libros de la trilogía, Niebla y Acero y El Dux del Fin del Mundo

No os voy a detallar los personajes, porque quiero que los descubráis vosotros mismos como yo lo hice, pero dejadme que os cuente que admiré a Anderico, quise al vándalo Gelimer y al godo Ibbas, me emocioné con la historia del joven britano Issa, mi pequeña debilidad en la novela, y me enamoré por completo del godo Salla, complejo, culto y misterioso. Y encima guapo... ¿qué más se le puede pedir? . Y ver crecer a Marco y Galieno junto a Attax me ha resultado entrañable.

¿Por qué un alano y no un vándalo o un suevo? Mi teoría es que el autor eligió un alano porque su pueblo fué barrido por los hunos, los suevos, godos e incluso romanos, desmembrándose y desperdigándose, de ahí que el huérfano alano, nacido ya en Emérita Augusta, se integrara en la población hispana desde niño tras ser acogido por los vándalos y pasar éstos a Africa. Era más fácil, deduzco, aculturizar a un "sin pueblo" que a un "arraigado" (aunque hay grupos de vándalos en la novela, aquellos que permanecieron en la península, aún más integrados en la sociedad hispanorromana). Aun así Attax conserva algunas costumbres de sus ancestros, tales como clavar su espada en tierra en ritos funerarios, o ser uno con el caballo en combate, pues eran los alanos los mejores jinetes de la época.

Las batallas que se libran en El Alano no son solo épicas, están narradas con rigurosidad histórica, y os aseguro que aún en su realismo no vais a echar de menos ni un ápice de esas gestas que nos relata la literatura fantástica, tan de moda en estos tiempos gracias a George R. Martin, o más bien a la televisión. La diferencia es que, como hablamos de la guerra de verdad, aquí los combatientes se agotan y hasta se mean encima cuando ven llegar al enemigo. Y no por ello dejan de ser titanes. Un soldado de nuestros días no aguantaría ni una milésima parte que ellos en una guerra de aquella época.

Su final es tan trepidante que me ha tenido enganchada casi sin aliento hasta que llega la calma tras la batalla. Deseando continuar con la segunda entrega, que no dudéis comentaré tan pronto me sea posible tenerla.

Os voy a dejar una ayudita, para cuando decidáis leerlo, que se que lo haréis. A mi me fue muy útil


Enlace: https://www.desdeelredondal...
Comentar  Me gusta         00



Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro