Jazz Café

En primer lugar quisiera hablaros de su título: Jazz Café. Es el nombre de un local de Jazz, un lugar emblemático de la ciudad de Córdoba y con mucho encanto, donde se puede oír música en vivo y en directo. Este garito es el lugar preferido tanto del autor del libro, como de su protagonista. El sitio idóneo donde ir a pasar un buen rato, en buena compañía y con la mejor música. Una vez aclarado esto, ya sabéis de donde proviene el titulo de este libro.
La portada es muy sugerente y en ella aparece el símbolo artístico identificativo de mi ciudad: las dovelas bicromáticas de los arcos de la Mezquita-Catedral.


Fachada del Jazz Café
Todo comienza un 24 de octubre, día de San Rafael, el Custodio de la ciudad de Córdoba desde el siglo XVI. Epicuro Salvatierra, Salva para los amigos, se encuentra en el Jazz Café realizando su visita rutinaria a este local cuando recibe la llamada de una persona que quiere contratarle para que investigue el asesinato de su pareja. La víctima era un reputado crítico y restaurador de arte y su cuerpo fue hallado en un callejón del casco antiguo de la ciudad. Se desconocen las causas de la muerte y el juez ha declarado el secreto de sumario. El asesino se ensañó con la víctima y le llenó el cuerpo de cortes y símbolos neonazis. Salvatierra acepta el caso y comienza a indagar. Gracias a unos contactos que tiene entre la policía logra saber, de manera extraoficial, que el fallecido fue víctima de un vil apaleamiento, pero esto no fue lo que causó su muerte. El investigador tiene la teoría de que quizás esté implicado en esta muerte un grupo de ultraderecha.

El personaje principal de esta narración, el detective Epicuro Salvatierra, es un hastiado profesor de filosofía que, cansado de enfrentarse a la misma labor diaria de la enseñanza que le aporta muy pocas satisfacciones, decide dejar la docencia y reconvertirse en detective privado. Salvatierra lleva una vida gris, anodina, y sus casos se limitan a meras infidelidades y cuestiones similares. Su personaje se caracteriza por ser primario, irracional, cavernario e incivilizado, pero es capaz de detectar la falsedad en las personas. José Sánchez Vázquez ha conseguido crear unos personajes atractivos y realistas. Tanto su protagonista como el resto de personajes están perfectamente construidos y son ricos en matices. Son todos personajes de a pie, cercanos y accesibles, de ahí que el lector pueda empatizar con ellos. Un detalle interesante a destacar es que hay una pequeña parte de la biografía del autor plasmada en su personaje principal, ya que él también es, al igual que Salvatierra, profesor de una materia de escaso interés actualmente, la filosofía. No he podido evitar imaginarme a José en la piel del protagonista de su libro.

Jazz Café es una novela de ficción que pertenece al género negro porque en ella se plantean temas de tremenda actualidad, como es la violencia de la extrema derecha. En esta novela hay una violencia soterrada que viene de los poderosos, entendiendo por poderosos a los que tienen la capacidad de saber explotar a los demás, no a los que tienen excesiva riqueza. A lo largo de la narración seremos testigos del proceso de cambio y transformación de una ciudad y su sociedad, así como de la inadaptación de su protagonista a dichos cambios.

Jazz Café es una historia cargada de contrastes en la que hay una enorme presencia de la actualidad y su ambiente social. En este libro se refleja claramente una ciudad llena de conflictos de todo tipo y de disputas entre sus diferentes clases sociales. La novela se desarrolla íntegramente en la ciudad de Córdoba, aunque en ningún momento se menciona expresamente su nombre. Córdoba llega a convertirse en un personaje más de la historia, donde se reflejan sus calles, su gente, sus bares y sus costumbres, incluida su forma de hablar, aunque su autor no ha pretendido crear, en ningún momento, una novela localista. El que la trama se desarrolle en Córdoba me ha hecho empatizar, aun mas, con esta historia al conocer todos los lugares por donde se han ido moviendo sus personajes.

Jazz Café está narrado en tercera persona por un narrador omnisciente y todo el planteamiento de su trama está realizado de una manera muy amena y con un gran sentido del humor. Un humor cargado de fina ironía que se refleja, sobre todo, en los muchos diálogos que llenan su trama a lo largo de los 57 capítulos, de corta extensión, en que se divide el libro. El lenguaje que utiliza su autor es sencillo y ameno. Me ha gustado mucho el argumento de esta novela. Me ha parecido un caso de asesinato bien planteado, con un excelente desarrollo y bien solucionado. El único pero que le pondría a esta lectura es el descarte que hace el autor de un sospechoso del asesinato, que me ha parecido demasiado forzado y poco creíble.

En resumen, Jazz Café es una novela negra tremendamente adictiva, con una extraordinaria ambientación y de fácil lectura. Su trama es muy absorbente y tiene un estilo narrativo intenso y cargado de irónico humor entre sus líneas. También contiene la denuncia de un sórdido entramado aún latente en la sociedad actual. Es una novela que posee todos los ingredientes para convertirse en un éxito de ventas. Sin duda alguna, recomiendo su lectura.

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