La Rueda Del Tiempo 4: El Yermo de Aiel

El Yermo de Aiel es la segunda parte del cuarto libro de la saga de la Rueda del Tiempo, que estamos leyendo en el @clubliterario_atreyu. Creo que hasta ahora es el que más me ha gustado y emocionado, con un final trepidante en el que ha habido escenas en las que, confieso, he dejado escapar alguna lagrimilla.

No sigáis leyendo si no habéis leído la saga pues esta parte contiene spoilers.

Rand, con Max, Egwene y Moraine viajan al Yermo de Aiel y entran en la ciudad de Rhuidean, donde nuestro protagonista por fin va a enfrentarse a su pasado y a lo que le depara el futuro, siendo cada vez más consciente de su importancia para el mundo que conocen. Mat acaba con más preguntas que respuestas, siempre gravitando sin poder evitarlo alrededor de su amigo y Egwene aprende de las Sabias Aiel.

Nynnaeve y Elayne por su parte se enfrentan al Ajah Negro en Tanchico, una ciudad devastada por la crisis económica y los conflictos militares, donde encuentran nuevos aliados inesperados y nuestra zahorí es consciente del poder que puede llegar a tener, si algún día consigue controlarlo.

En la Torre Blanca ocurre lo impensable, ay…

Pero la que más he disfrutado es la historia de Dos Rios, con nuestro Perrin, tan noble, y la impetuosa Faile, que es la historia que más me ha hecho emocionarme y me ha llenado el corazón.

Seguimos con la saga… ¿la habéis leído?

La historia se divide en 3 líneas, abarcando cada una de ellas a varios protagonistas y ocupando bastantes capítulos consecutivos antes de volver a otra. Esto último para mí es un minipunto negativo, ya que pasa tanto tiempo desde que dejamos una línea hasta que volvemos a ella que a veces me olvido de ciertas cosas.

Poco a poco, con el paso de los libros, va aumentando la tensión en el ambiente, cada vez más gente está preparándose para la gran batalla que se avecina. Y esto es algo que he notado especialmente en este tomo y que me ha tenido muy enganchada en algunos momentos.

Perrin cobra mucho protagonismo en su regreso a Campo de Emond. No es la primera vez que seguimos de cerca los movimientos de este personaje, por lo que le he ido cogiendo mucho cariño.

Vemos cómo avanza la acción, vamos acercándonos a punto cumbre, y pasan muchas cosas que nos tendrán en vilo, y nos dejarán con muchísimas ganas de continuar conociendo la historia. al menos es lo que me ha pasado a mí, y estoy deseando empezar el siguiente libro.