La casa de los mil pasillos

Después de haber leído los dos primeros libros de esta trilogía, yo ya sinceramente, no tenia esperanza para este tercer y último libro, pero me ha sorprendido (para bien) y me ha encantado, personalmente, creo que ha sido gracias a que me siento identificada con la protagonista y que el misterio era super interesante, a la par de que los personajes de los anteriores libros vuelven a aparecer, aunque sea de forma breve.

Como en los dos libros anteriores, nos encontramos ante una lectura sencilla y rápida, sin muchas complicaciones, en la que la magia y las aventuras de su protagonista no cesarán, dándonos grandes momentos en casi todos los capítulos. Si bien es cierto que en este no hay "romance", tampoco lo necesitaba. Con esta entrega hemos explorado todavía más del mundo en el que transcurren los libros, un mundo fantástico.

Creo, que he de destacar algo muy bonito, y es que en los tres libros tienen algo en común aparte de los protagonistas, y es que en todos ellos hay un perro. Un pequeño detalle que puede parecer poco importante, pero es un detalle que me ha encantado y que aquí cobra la importancia que se merecen estos compañeros de aventuras.

Punto y final a esta trilogía.
Obviamente, por temática, estructura y desarrollo, estos libros son un elaborado "cuento" destinado a los que están abandonando la infancia, aunque sin duda los jóvenes y adultos puedan sacar de él valiosas lecciones mientras disfrutan de un agradable tiempo de lectura.

2. A diferencia de los dos anteriores de la trilogía de Howl este tomo no me ha convencido. Conocemos a Charmain, una adolescente algo mimada y que prácticamente lo único que hace es comer y leer libros, que es enviada a cuidar la casa de un tío abuelo mago que estará ausente un tiempo (aunque a ella nunca se le ha enseñado ningún tipo de tarea doméstica). Cuando llega a la casa se da cuenta de que es una casa especial, llena de salas que a simple vista es imposible que estén allí, pero que cogiendo los pasillos con una dirección concreta van apareciendo. En la casa también vive Waif, un perrito un tanto especial, y llega Peter, un aprendiz de mago que está dispuesto a ser el mejor alumno del tío abuelo de Charmain y que se lleva una sorpresa al enterarse de que no está. Entre los tres irán descubriendo poco a poco los secretos y los trucos que hay en la casa. A la vez, Charmain es llamada para ordenar la biblioteca del rey (algo que ella misma solicitó) y que le llevará a inmiscuirse en la misión de resolver enigmas que necesitan respuesta. Allí conocerá a Sophie, a Calcifer, a Morgan y a un tal Twinkley... que están ayudando al rey a descubrir a dónde va todo el oro que le desaparece. Todo se complica y se descubrirán planes siniestros contra el rey y contra toda la ciudad de High Norland.

Es una historia que tiene elementos atractivos: magia, una historia de reyes y princesas malignos, seres mágicos chulis como los magos, brujas o los kobolds y otros terroríficos como los lubbok, una casa que es un laberinto donde incluso hay cambios de tiempo (algunas salas están en el pasado), secretos, misiones por cumplir... Pero todo es como un barullo que no termina de cuajar, aunque el final se cierra relativamente bien y también tiene giros que sorprenden, no compensa lo anterior. Encima a la protagonista le he tenido bastante tirria durante todo el tiempo. Y he de decir que en algunas partes estaba ya leyendo por leer, por no quedarme sin saber cómo acababa, pero poco más.

Quizás a otros les guste más esta historia, yo puedo decir que me ha resultado entretenida en algunas partes, que los elementos de base son atractivos pero bajo mi punto de vista no está del todo explotada la trama. Así que no me ha gustado como para llegar a las 3 estrellas. Es una lectura que si no la hubiese hecho tampoco consideraría que me he perdido algo.

En esta ocasión nos situamos en High Norland, un país al este de Ingary, y ya han pasado dos años desde lo sucedido en los libros anteriores.

Esta vez nuestra protagonista es una adolescente llamada Charmain que toda su vida ha estado entre algodones. Lo único que ha hecho (y lo único que sabe hacer) es pasarse el día entero leyendo. Así que cuando de un día para otro se ve sóla en la casa de su tío abuelo William, un gran mago de High Norland al que no conoce, no sabe qué hacer: no sabe cocinar, no sabe limpiar y sobre todo no sabe hacer magia, porque su madre le ha enseñado que hacer todas esas cosas no es respetable. Así que Charmain, ante la más mínima dificultad o problema lo soluciona cogiendo un libro y ponerse a leer.

Esto cambia cuando llega un nuevo personaje que, aunque es torpe y hay cosas que no sabe hacer, sabe sobrevivir mucho mejor que Charmain y ella, muy a su pesar, no le queda más remedio que aprender. Además, Charmain se verá involucrada en misterios y problemas de la familia real (la parte más emocionante de todo el libro).


Lo cierto es que al principio el libro se me ha hecho algo lento y más de una vez me han dado ganas de coger a Charmain y enseñarle lo que su madre le ha negado durante tanto tiempo. El libro empieza a mejorar cuando llega este nuevo personaje, Peter, pero la mejor parte es sin duda cuando hace su aparición nuestra Sophie y sobre todo Howl.


¿Os acordáis que en la reseña de El castillo ambulante os dije que Howl me parecía que tenía una personalidad que le hacía parece un niño pequeño?

Bien, pues aquí lo demuestra, literalmente jajajaja Me ha encantado y no os hacéis una idea de lo mucho que me he reído con él.


La casa de los mil pasillos se me ha hecho bastante similar al primer libro: Una joven que, se supone, no sabe hacer magia, la casa de un mago que no es como cualquier otra casa, un joven mago aprendiz algo torpe…

La autora ha cogido el mismo esquema de El castillo ambulante y lo ha cambiado lo suficiente para crear una nueva historia (siempre conectada con los libros anteriores).


Esta vez, la casa del mago vuelve a ser diferente por dentro que por fuera, no tiene las dimensiones que se supone debe tener y no todas las puertas dan a donde se supone que deben ir. La diferencia es que mientras la casa de Howl era normal por dentro, pero aparentaba ser un catillo en continuo movimiento por fuera; la casa que debe cuidar y vivir temporalmente Charmain es normal y pequeña por fuera pero por dentro es lo contrario. Es más, para ir a ciertos sitios hay que dar vueltas, girar a un lado o a otro…

La verdad es que me habría gustado que explorasen más la casa, que se mostrasen más habitaciones y secretos de la casa, aunque lo que ya nos cuenta es emocionante (cuando deja de parecer una historia floja).

Y los tres libros tienen algo en común a parte de Howl, y es que en todos ellos hay un perro. Un pequeño detalle que puede parecer poco importante, pero es un detalle que me ha encantado y que en La casa de los mil pasillos cobra la importancia que se merecen estos compañeros de aventuras.


Y por supuesto, esta vez también nos deja un mensaje, sobretodo para esos padres que sobreprotegen a sus hijos impidiéndoles hacer las tareas de la casa o aprender a sobrevivir por su cuenta por miedo a que se hagan daño o que demuestren que son capaces de crecer y sobrevivir sin ellos. La autora nos muestra lo perjudicial que puede llegar a ser esa actitud y lo perjudicial que es que los jóvenes prefieran no hacer nada ante el más mínimo problema y que prefieran una vida de comodidades (dicho de forma clara: ser unos vagos porque es lo que les han enseñado a ser).

También lanza un mensaje a los jóvenes y es que ser vago, arrogante y mal educado no te llevará a ninguna parte, al contrario, sólo te puede causar cada vez más problemas, muchos de ellos innecesarios.


Ya cuando quedan pocos capítulos para acabar, ocurre algo que te mantiene con el corazón en un puño, deseando que lo que parece que ha pasado no sea cierto.


Y en cuanto al final, bueno, se mantiene en la misma línea que los anteriores. La historia queda cerrada, aunque perfectamente podría haber tenido una cuarta parte si Diana Wyne Jones hubiera querido (y yo lo habría leído también).

Reseña en el blog:
Enlace: https://mitesorolibros.blogs..

De las tres novelas de la saga es la que menos me ha gustado y con diferencia. 

Como las otras es entretenida y se lee fácil, los personajes están bien, hay momentos divertidos, pero es la historia menos interesante y más previsible.

Terminada la saga, eché de menos un poco más de relaciones y profundidad en los personajes; pero bueno, en general, es una saga divertida, bien escrita y muy entretenida.

Debía esta trilogía y ¡ya la he terminado! 😌 ¿Me ha gustado? Sí, peeeeero... creo que el mejor libro es el primero de la serie.

Para empezar, diré que la historia es divertida, tiene sus escenas de comedia, pero me ha parecido que le costaba arrancar. Por lo menos hasta el 50% (creo recordar que incluso más) no existe nudo, no he sabido hacia dónde se dirigían los personajes, ni dónde estaba la trama. Durante gran parte de la historia, los dos personajes centrales se dedican a ir de un lado al otro sin rumbo. Y cuando al fin el nudo se establece, la novela termina. 🥲

La parte buena ha sido sin duda las escenas cómicas y ciertos aspectos de los personajes. Me ha gustado mucho (aunque a veces me desquiciaba) Charmain, su lado perezoso y su forma de ser protestona. Y de Peter me quedo con su infinita paciencia y su torpeza.

No es un libro que vaya a recordar igual que el primero, el cual me encantó. Admito que me costó bastante seguir leyendo y que barajé la posibilidad de abandonarlo. Aun así continué porque le tengo cariño a esta autora y porque Howl siempre será Howl. 🖤

Review completa: http://markapaginas.blogspot.com.es/2013/04/la-casa-de-los-mil-pasillos-diana-wynne.html

Después de haber disfrutado tanto de El castillo ambulante y El castillo en el aire por lo feliz que me hicieron cada una de sus páginas, me he adentrado en La casa de los mil pasillos sabiendo que me llenaría de calidez por dentro y ha cumplido mis expectativas. Es verdad que el anterior fue mucho más divertido y tuvo una mejor trama, pero ha estado a la altura de la trilogía y ha dado un buen cierre. Como dije en la reseña anterior, es una lectura que voy atesorar siempre.

Charmain se ve enredada en las exigencias de su tía Sempronia. Ella, que había sido educada lejos de la magia y otras cosas no respetables, acaba cuidando la casa de su tío abuelo William, un laberinto de pasillos que pueden conducir a cualquier lugar. Su vida se complica cuando descubre nuevas criaturas, al aprendiz de mago Peter que la saca de quicio y lo que es trabajar para la biblioteca real. Cuando aparece Sophie con su hijo, Calcifer y Twinkie, los problemas crecen aún más y tendrá que buscar la forma de solucionar el lío en el que se había visto envuelto su tío abuelo para salvar North Norland de un terrible destino.

La historia está escrita de una forma sencilla y ligera que te envuelve. Esto no lo convierte en un libro malo, sino que hace que la magia aparezca aún más en cada página. Ha sido muy agradable ir viendo cómo las cosas más simples podían convertirse en mágicas con solo una palabra y, además, cada palabra está escrita con tanta dulzura que no puedes dejar de sonreír en ningún momento. La aparición de nuevas criaturas y situaciones divertidas hacen que te rías constantemente haciendo que no parezca importante que sea previsible.

Es una historia ideal para disfrutar y pasar un rato agradable sin pensar demasiado en los problemas del mundo. Te llena de calidez por dentro permitiéndote sonreír constantemente. Es por eso que me ha dolido despedirme de una historia tan disparatada, con personajes locos que te llenan de felicidad. Es posible que vuelva a ellos en algún momento porque acaba siendo una lectura que merece la pena.

En conclusión, debo decir que, si os gustó los primeros libros, le deis una oportunidad a este. Es muy bonito conocer a los nuevos personajes y darte cuenta de las diferentes conexiones que hay en la historia.
Enlace: https://www.goodreads.com/re..

Pues no ha estado mal. Sí es cierto que, de los tres libros de esta trilogía, éste es el que menos me ha gustado.

No aguanto a la protagonista. Es caprichosa, no hace más que enfadarse por todo y discutir. Tengo que admitir que el libro empieza a ponerse muy interesante a partir de la mitad del libro cuando Sophie y Howl aparecen por fin. Si os suenan estos nombres, es porque son los protagonistas de El castillo ambulante, la primera parte de esta trilogía.

Cuando estos dos personajes aparecen, ya sí que se pone todo mucho más interesante y con mucha intriga. Me encantan Sophie y Howl desde el primer libro y no es de extrañar, le dan un punto cómico y mucho más intrigante a la trama.

La verdad es que es una bonita forma de terminar esta trilogía y despedirse de estos personajes tan entrañables, aunque se pueden leer totalmente independientes. Eso sí, es mucho mejor leerlos en orden para conocer a todos los personajes que van apareciendo de pasada en cada libro.
Enlace: https://mundosdeairin.blogsp..

El principio un pelín lento pero pronto todo empieza a tener sentido y cuando llevas unos cuantos capítulos no puedes parar de leer ¡Genial!
Además ¡Siempre es agradable volver a encontrarse con Howl!

En esta tercera entrega de las aventuras de howl y sophie tenemos a un nuevo personaje. Una joven un poco mimada que feliz de poder librarse de la atención de sus padres acepta cuidar la casa de un mago.
Al igual que el segundo libro me sorprendió el giro que tuvo y como personajes peculiares toman tal importancia. Adoro la manera en que Wynne relata las historias tiene la cualidad de envolver a sus lectores en la historia y al final me es difícil recuperarme de esa historia.