La quinta estación

Hacía tiempo que no leía una historia de fantasía tan intrincada y con un concepto tan original. Hay poco de este libro de lo que me pueda quejar.

La narrativa de la autora es refrescante. La forma que tiene de unir las líneas temporales te pilla por sorpresa. Si a eso le añadimos un buen puñado de personajes realmente interesantes que van cambiando a lo largo de la historia, es una gozada de libro.

Quiero destacar sobre todo el desarrollo del universo, los detalles, la magia y el concepto en sí. La forma de describir los procesos por los cuales los personajes acceden a sus habilidades te da la sensación de real, de lógico, de que si lo intentas siguiendo lo que te dice tú también vas a ser capaz de mover rocas y parar terremotos sólo con concentración. No recuerdo haber leído nada semejante, y eso en un horizonte de libros de fantasía donde es raro que uno no te suene al otro, ya es algo.

Todas las estrellas, y desde luego me voy a empezar el segundo libro ya, porque el final me ha dejado con un cliffhanger un poco cruel. Jemisin se sitúa en mi radar de autoras favoritas.