Colombia años 90. Un padre asesinado por sicarios. Una familia destrozada, rota. Una niña que ha de aprender a vivir una nueva realidad de golpe. Sara Jaramillo Klinkert (Medellín, Colombia, 1979) nos regala un viaje de aceptación a una situación traumática, desgarradora, no elegida y muy difícil de gestionar como es la muerte violenta de un padre que la adora. Una situación trágica que no comprende, que no ha elegido y que le hace rebelarse contra el mundo. Cada miembro de su familia, antes feliz y ahora rota, se crea su propio caparazón, su propio mecanismo de defensa. La naturaleza y las aves, las drogas o la fotografía dan salida a un dolor muy difícil de superar, y Sara nos va narrando, a partir de un dialogo interior, de una especie de diario emocional, lo duro que se hace dejar marchar a su padre definitivamente, continuar de una vez con una vida tan marcada y que, para ella, nunca va a ser la misma. Este libro intimista y duro nos acerca a una realidad que, aún estando enmarcado en un contexto de violencia en la Colombia de los años 90, podría ser la de cualquier pérdida familiar inesperada, sentimientos universales, dolor y tristeza profunda, aprendizajes forzados a los que te obliga la vida. Una precioso libro que nos acerca al dolor del alma y las diferentes maneras de gestionarlo. Un libro muy recomendable. |