Igual empezar a leer algo de la famosa pareja Christian-Anastasia, o lo que es lo mismo Grey-Steele, por el último libro publicado es a partes iguales un error y un acierto, os diré el motivo. Un error: al no saber nada de la historia las alusiones al pasado me suenan a chino, no sé de qué demonios hablan. Un acierto: visto lo malo del último, me he ahorrado 3000 páginas de sufrimiento. Ya se ha dicho todo lo posible y lo imposible de Cincuenta sombras de Grey, no creo que pueda añadir nada nuevo; él, rico y dominante, ella poco más que una adolescente pava y sumisa. Dice la sinopsis: La historia de amor que ha cautivado a millones de lectores, la causa, el sueño erótico de mujeres en busca de alguien que las mantenga y el de hombres que anhelan una sirvienta sexual. Todo un clásico, de la literaria erótica para ellas y del cine perno para ellos. Los ganadores de todo esto, casi a partes iguales, la escritora (que se ha forrado, con 165 millones de ejemplares vendidos, con poco que le paguen ya es millonaria), los fisioterapeutas (que con tanta postura y práctica sexual de riesgo no paran de recibir clientes) y los psicólogos (que tras el fracaso de intentar vivir en primera persona la novela la gente se ha quedado más tocada de la cabeza de lo que ya estaban). |