Esta es una novela de fantasía con algo de ciencia ficción, aunque también la catalogaría como una historia de esperanza, trascendental en su reflejo de la naturaleza humana, o de temas de índole personal de mucha gente. Todos cometemos errores, fallos o decimos aquello que, de pensarlo dos veces, nos callaríamos. Pero luego ya no hay marcha atrás y simplemente nos toca aprender, para no tropezar de nuevo. David, nuestro protagonista, sabe mucho sobre ello. Cansado de un trabajo en el que se siente vacío en su rutinario día a día, debe llevar lo mejor que pueda su primer fracaso matrimonial. Una hermosa mañana de sol, sale en bicicleta para pasear por los montes de la ciudad de Castellón. Desde una de sus cumbres, mientras contempla innumerables campos de verdes naranjos, con el azul y tranquilo mar Mediterráneo de fondo, siente una presencia . Después de un leve desvanecimiento regresa a su casa siempre con la extraña sensación de que algo le ocurrió mientras estuvo sin conocimiento. A partir de ese día empieza a tener sueños muy extraños sobre un ser de fisiología muy distinta a la nuestra. También contemplará una ciudad, ubicada más allá de nuestra galaxia, donde hay edificios y maravillosas pirámides. Sueños que se repetirán, junto a lagunas mentales que padecerá nuestro protagonista, angustiado por no recordar apenas nada, aunque en su reloj las horas pasen sin tener la certeza de haber hecho cosa alguna durante esos espacios de tiempo. Un día EMMO le hablará, contándole que es una entidad que ahora vive dentro de él, y que entró utilizando un transmisor de conciencias, un aparato capaz de lanzar la conciencia del etéreo ser a cientos de años luz. Le hablará de su mundo, donde macro -estructuras traslúcidas flotan de forma permanente. de su forma de vivir y de cómo entienden el amor los suyos. La vida de nuestro protagonista irá cambiando junto a la de todos aquellos que siguen a su lado. Nuestros dos amigos protagonistas, humano y alienígena, conversarán sobre toda clase de temas, y sus diálogos llenarán parte de la novela. Si no fuera por el habitante de otro planeta, yo os diría que el autor quiso plantearnos muchas cuestiones, que deberéis entender según vaya terminando de contarlas. Ya os lo dije al principio… Es una historia que se refleja como un canto para la esperanza, acompañada de fantasía y mundos perdidos en el infinito del espacio. Jaime Blanc nos dejó un libro donde nos veremos reflejados en muchas de las dudas de su personaje, teniendo esa sensación (cuando nos vayamos acercando a sus últimas páginas), que de vez en cuando un final feliz se agradece para no perder la humanidad que nos queda. + Leer más |