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El esperado desenlace de la trilogía 'Otoño en Londres' [también admitiré que yo pensaba que sería una tetralogía, fallo mío] ha supuesto una pequeña/gran decepción para mí. A pesar de seguir tratando temas importantes (como la orientación sexual, el paso a la "edad adulta", las depresiones o trastornos alimenticios, etc.) y de ser una lectura fácil y amena, ha pasado todo demasiado "rápido" (se tenía que acabar la historia) pero ha sido demasiado lento... A diferencia de los dos primeros libros, en este apenas he notado acción ni "salseo", nada de inquietud o preocupación por los personajes o un "¿y qué pasará ahora?" Cada giro me ha dejado con una sensación de, "ah, pues vale" No diré jamás que es previsible, aburrido o que esté mal escrito, porque con Andrea Izquierdo sabes que nunca pasará algo así. Sigue teniendo giros argumentales y las cosas cambian cuando menos te lo esperas, pero en ¡Primavera en Tokio' no han cambiado como yo esperaba ni han conseguido emocionarme, es más, me han faltado páginas con algunas explicaciones y decisiones. Me duele darle esta calificación pero ya que a los dos primeros les di 4 estrellas no sería justo darle 3 estrellas a este. |
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