Me gustan mucho los relatos cortos y microrelatos. Considero que hay que tener una capacidad especial para transmitir una historia en muy pocas líneas y que impacte. Y ya os aseguro que los relatos de Iwaski me han impactado (unos más, otros menos y otros mucho). Con deciros que procuraba no leerlos a la caída de la tarde, ya que alguna noche he soñado con monjas caníbales... Ahí lo dejo. Historias que te dejan desazón nada más acabarlas. ¿Os atrevéis? |