GYO, Vol. 1

Consiste en una pareja (Kaori y Tadashi) que realiza un viaje a Okinawa, y durante ese paseo, uno de ellos se da cuenta que hay un olor fétido en el aire. Más adelante, descubren que el olor proviene de los peces que... ¡se están saliendo del agua! Y no sólo eso, le han salido patas. El viaje se torna en una búsqueda sobre el por qué está sucediendo esto.
Aunque la trama podría sonar "sencilla", la verdad es que las ilustraciones de Junji Ito causan esa sensasión de incomodidad. Sumado con toda la ambientación que él logra crear alrededor de sus personajes.
Con las casi doscientas páginas, uno pensaría que no avanza mucho la historia y que todo se quedaría en el viaje de Okinawa; sin embargo, la historia logra avanzar un poco más allá y en este número logramos alcanzar ver un poco sobre lo que es la razón de estas criaturas.
También es importante mencionar que las expresiones de horror de sus personajes frente a las situaciones que les rodean ayuda a mejorar la tensión para el desarrollo de la trama.
Lo único que he señalar que no me gustó fue un poco la actitud de Kaori, quien es muy sensible al olor de los peces, y durante la mayor parte de esta entrega se la pasa quejándose. Aunque es entendible hasta cierto punto, me hubiera gustado que Junji Ito no se hubiera concentrando tanto en ese aspecto. Sin embargo, falta ver qué es lo que veremos en la siguiente entrega.
Respecto a la edición que nos ha traido Panini Manga México, he de decir que me siento contenta con ella. Trae sobrecubierta (tiene un efecto de brillo) y te regalan un marcapáginas en su compra. El tamaño es diferente a los que hemos visto regularmente por parte de la editorial (13cm x 19cm).