Al leer este libro hay que tener una cosa presente, es una autobiografía autorizada por el propio Steve Jobs y como tal, ya sea consciente o inconscientemente se tiende a ensalzar la figura del protagonista. Nadie puede negar que Steve Jobs era un genio, un innovador, pero no es menos cierto que era un ser insoportable, un tirano con las personas y aunque en el libro no se puede obviar estos hechos, de sobra conocidos, se tiende a minimizarlos o justificarlos en aras de su espíritu creativo. Lo digo claramente, a mi no me gustó y me esperaba mucho más de esta obra, como mas profundidad en el personaje, mas realismo. Es un libro que me llegó a aburrir y eso es un dato muy significativo cuando nos enfrentamos a una obra de un personaje tan fascinante como Steve Jobs. |
Cuando #ElonMusk era un niño en Sudáfrica, sufría de acoso escolar, un grupo de niños lo empujó por unas escaleras de hormigón y lo patearon a tal grado que pasó una semana en el hospital dejándole pocas cicatrices físicas, pero profundas marcas emocionales que sólo empeoraron cuando Elon llegó a casa tras ser dado de alta del hospital, y su padre lo regañó...
El impacto psicológico que su padre le causó es algo que lo ha seguido toda su vida, incluso cuando se convirtió en un joven fuerte pero vulnerable al mismo tiempo, propenso a bruscos cambios de humor -a lo Jekyll y Hyde-, con una gran tolerancia al riesgo, ansias de drama, un épico sentido de misión y una intensidad maníaca, cruel y a veces destructiva.
Durante dos años, Walter Isaacson se convirtió en la sombra de #ElonMusk, asistió a sus reuniones, recorrió juntos sus fábricas, y pasó horas entrevistándolo a él, a su familia, amigos, compañeros y adversarios. El resultado es un relato íntimo y revelador, repleto de historias asombrosas, triunfos y perturbaciones, que aborda la pregunta: ¿son los demonios que mueven a Musk también lo que se necesita para impulsar la innovación y el progreso?