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Iris Romero Bermejo nos sumerge con esta historia en el mundo paranormal, con posesiones incluidas, pero sumándole a la narración romance y humor, todo ello girando en torno a Emma. Emma, la reportera sin miedo, capaz de entrar a un cementerio de noche y no inmutarse pero incapaz de hacerle frente a los sentimientos por miedo a la pérdida o el abandono. Su alocada vida laboral, donde un concurso nos transporta a diferentes países, juntando un variopinto grupo de concursantes y la sospecha de tongo por parte de la organización del mismo y su alocada vida personal, que se mezcla con la laboral en varios momentos. Con unos personajes que no tienen desperdicio, algunos muy curiosos, como Aarón, algunos un tanto repelentes, como Sebas y algunos que me han conquistado, como son Ramón y su compulsión por acariciar a Rogelio o Willian, apodado el ojeroso, que no me importaría conocer más, mucho más. Por tanto debo decir, que esta novela de Iris Romero Bermejo, ha sido un gran descubrimiento, con un tema que a priori no sería mi primera elección, ya que no me apasionan las posesiones ni lo paranormal, pero a la que le dí una oportunidad porque la portada y el título me llamaban la atención. Seguro que volveré a leer a esta autora en breve. |
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