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Como dije en la reseña del primer libro, lo más característico de la bilogía son los mensajes, que dan pie a luchar por las propias creencias antes de rendirse a los ideales de una nación con un sistema injusto, que beneficia únicamente a aquellos que tienen el poder. Me llama mucho la atención y a la vez me asusta el hecho de que todo lo que pasa tiene bastante similitud con la vida real y, aunque las sociedades son ficticias, sí que podrían existir personas que se postularan de parte de un lado o del otro (por no hablar de los nacionalismos). En cuanto a personajes, se aprecia una gran evolución, debido a las circunstancias que tienen que vivir maduran mucho e incluso descubren su identidad. Destaco entre ellos a Via y Neith (mis favoritos), Eider, Irati y León. No se cómo explicar todo lo que me han hecho sentir con sus inseguridades, sus sueños... Hasta he llegado a sentirme identificada con su deseo de una sociedad mejor. El tema de la representación LGBT de mantiene aún más que en el libro anterior ya que se introduce el género no binario y surgen nuevas ships pertenecientes a este colectivo. En conclusión, esta bilogía se ha convertido en una de mis favoritas (junto a Seis de Cuervos). Tiene todo lo que busco en una distopía y más: acción, diversidad de personajes, critica social, momentos que hacen sufrir y una ambientación original. La recomiendo muchísimo a gente que por ejemplo haya disfrutado con Los juegos del hambre u otros libros por el estilo que presentan un mundo injusto en el que los protagonistas tienen que luchar para sobrevivir a él. |
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