Segunda novela protagonizada por Arturo Andrade, en esta ocasión y a causa de lo sucedido en “El arte de matar dragones, es degradado de teniente a “guripa” (soldado raso) y obligado a alistarse en la División Azul, que combate en plena segunda guerra mundial en la helada Rusia. Un extraño asesinato le devuelve el protagonismo y pasa a ejercer de detective en medio del frio y de la muerte. Me ha impactado la historia: Los españoles, algunos por sus ideales, muchos obligados por las circunstancias, embarcados en una guerra, que no es la suya. El pueblo ruso intentando sobrevivir a toda costa y un frio inimaginable de 40 grados bajo cero. La personalidad de Arturo Andrade, vuelve a ser ambivalente, por un lado, es brutal en su relación con Zira, por otro lado, es capaz de jugarse la vida enfrentándose a un alto mando alemán por defender a Alexsandr, un simple niño ruski. Al igual que la anterior no es una novela fácil y como en la vida real los buenos no son tan buenos y los malos tienen sus motivos. Me ha gustado. Ignacio del Valle es un escritor a tener en cuenta. + Leer más |