Las confabulaciones

Dice su autor, Ignacio Miquel: "Mi novela es un relato sobre las ficciones en las que vivimos, sobre las mentiras que nos construyen o contribuimos a construir", no podría estar más de acuerdo con él.
Nuestra vida es una ficción que no somos capaces de controlar del todo, en el mejor de los casos controlamos una parte si nosotros hemos escrito el capítulo, pero lo normal es que nos den los capítulos escritos y nosotros solo nos dedicamos a leerlos a buen o mal ritmo.
Su protagonista, Julian, es un escritor en proyecto, dependiente en la librería de unos grandes almacenes, que de la noche a la mañana gana un certamen literario de gran repercusión. Ese acontecimiento cambia el rumbo de su vida para siempre, ya nada es lo que parece y los sueños dejan de parecer maravillosos para llegar a convertirse un poco en pesadilla.
Otro personaje a destacar es la madre de Julián, una mezcla entre madre coraje y madre cárcel, algo que sin duda ha marcado el carácter de Julián, y que da un matiz ácido a la novela.
Ese punto de los años 90 es lo mejor de todo, recuerda lo mucho y bueno de esa década ya tan lejana para todos.

Las confabulaciones de Ignacio Miquel es un libro que empecé con muchas ganas pero que me fue depecionando un poco a medida que iba avanzando. Me costó empatizar y entender a los personajes pero sé que para otros gustos puede ser una excelente novela sin desperdicio de principio a fin. Descripciones jugosas en una trama, inicialmente doméstica (cualquier ciudad, cualquier persona) para, una vez presentados los personajes - excelentemente construidos por cierto -, enredarse en una historia que atrapa y en la que se llega a sentir uno cómplice absoluto del protagonista de la novela. Toques de humor, sarcasmo, análisis de la sociedad y de las relaciones humanas... todo ello, dejado caer como parte de la novela, otorga al lector una propuesta adicional de reflexión al margen de la propia historia, ya de por sí interesante y entretenida con una prosa trabajada y gratamente expresiva.
Absolutamente recomendable.

"Muy pocas veces, más allá de Landero, he visto contar con tanta gracia y humor inteligente, no exento de reflexiones agudísimas, sorpresas como la que rodea a la bella chica rusa que Julián persigue o la hilarante historia recuperada de la orgía de Luis Roldánb, exdirector de la Guardia Civil que, tengo que advertir a los jóvenes lectores, no es invención de Ignacio Miquel, sino historia verdadera de unos años de corrupción que desembocaron en uno de los episodios más castizamente costumbristas que ha vivido la política española. Solo la historia política española resulta más ficcional que una novela, pero hay que saber contarlo y hacernos reír con inteligente humor como aquí ocurre”.

José María Pozuelo (ABC Cultural)

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Empecé este libro con mucho entusiasmo por la sinopsis que había leído anteriormente de él, pero a medida que avanzaba en mi lectura me iba decepcionando un poco más. Personalmente creo que este libro no era para mí, el autor emplea palabras que se me han hecho poco realistas y rebuscadas, creo que si hubiera narrado la historia de una manera más cercana me habría gustado más. Vuelvo a decir que es mi punto de vista, estoy segura de que a muchas personas les ha encantado este libro pero a mí me ha decepcionado por su forma de ser narrado y por como se iban narrando las cosas. Además, no logré conectar con ninguno de sus personajes, el protagonista se me atragantó y su filosofía de vida a veces me resultaba aburrida y tediosa.
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