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Nos cuenta la vida de Rebecca una estudiante de universidad que junto con sus amigas se esfuerzan por lograr sobrevivir a la vida estudiantil, pero pronto comenzaran a acontecer muertes grotescas, al principio son clasificadas como accidentes pero en cuanto el patrón en las muertes es obvio queda claro que hay un justiciero anónimo que esta matando chicos "problemáticos" y el miedo y la incertidumbre llenan el campus pues cualquiera podría ser el asesino. La historia aunque es un thriller realmente se enfoca en una enorme critica social, el miedo que sienten cada día las mujeres al enfrentarse al mundo, miedo cuando cualquier hombre extraño se acerca, miedo a salir solas, miedo a salir de fiesta, muy parecido a la situación que vivimos en los últimos tiempos en México, entonces comienzan a asesinar específicamente a chicos que es obvio no se han arrepentido nunca de lo que han hecho y se han librado siempre de las consecuencias y hace que se volteen los papeles, esta vez son ellos los que tienen miedo, los que se sienten en peligro,te hace preguntarte ¿se justifica un asesinato si la victima es un violador?, ¿se puede decir que es justo o no?. La autora no profundiza mucho en las personalidades de las chicas, y aunque se vuelve un poco predecible quien es el asesino en lo personal si me gusto mucho, a ratos si se siente un poco flojo pero te deja lo suficientemente intrigada para seguir con la lectura, eso si logro que me encariñara con las tres chicas principales Ellie, Rebecca y Hafsa, un libro bastante entretenido, se lee rápido y con un tema muy interesante. |
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