Este volumen me ha gustado bastante más que el anterior, tiene un ritmo más constante, en definitiva es más dinámico en su lectura. La trama es bastante triste, en general, tiene diversas historias entremezcladas y todas me han gustado mucho la de Gudule, la de Claude Frollo, la de Esmeralda y como no, la de Quasimodo, todas tienen un nexo en común, el amor, pero en gran parte este libro trata sobre el desamor, teniendo como escenario París y como trasfondo a Nuestra Señora de París y acompañado de las ilustraciones maravillosas de Benjamin Lacombe |