Me ha parecido una obra maestra de la Literatura del XX. Entronca con los temas clásicos (la sátira, la ironía, la alegoría, el mundo kafkiano - capítulo 8-, el contraste "tonto-sabio" de tradición popular...). Hant'a recuerda al "tonto" del buen soldado Svejk, de Hasek. El personaje de Hrabal es víctima de los acontecimientos políticos e históricos: el nazismo y el comunismo atroces. ¿El refugio? La Literatura, el Arte, la belleza... Todo pasado por el filtro "beodo", alucinógeno, sarcástico, poético e ilusorio. Hrabal es heredero de las corrientes absurdo-existencialistas, pero, sin suda, esta novela es un canto de amor hacia la Literarura y a la Cultura. |