Sencillamente maravilloso. Eleanor se ha ganado un huequito en mi corazón. Ella, 30 años, soltera, sola, rara, con problemas con el alcohol y entrañable. Con esta descripción podría parecer Bridget Jones pero nada que ver. Eleanor tiene motivos muy fuertes para ser como es, un pasado turbio, una madre destructiva y un secreto que más o menos veía venir, pero que el hecho de verlo venir no me restaba interés. Cambia su vida por completo cuando conoce a un compañero de trabajo, el informático, Raymond, que por cierto me lo como, no se puede ser mejor persona. Creo que Eleanor debe sufrir Asperger aunque es algo que no se confirma en la historia. Es un libro que pese a ser dramático, que lo es, es capaz de sacarte una sonrisa e incluso en ocasiones carcajadas. No quería que acabara, pero acabó, aunque el final me ha dejado un poco a la expectativa porque esperaba que pasara algo que no termina de pasar. |