Para los que seguís mi cuenta desde que leí el príncipe cruel y el rey malvado sabéis que tenía ganas de conocer como concluía la historia. Puede que el problema haya sido mis altas expectativas. El libro ha estado genial, y es el que más acción tiene, pero muy precipitado. Aquí es donde podemos, por fin, ver la evolución de Cardan, pero es una evolución tan brusca que parece una persona diferente. No me gusta que haya perdido toda su esencia de chico malo que tanto me gustaba. Jude, pobrecita, no da ni una. Se pasa todo el libro medio en trance, medio sin saber lo que hace. Los otros personajes pasan a un segundo, casi inexistente, plano y son solo excusas para darle protagonismo a Jude. A pesar de todo, he disfrutado muchísimo del libro, no podía dejar de leerlo y tampoco quería terminar. Los diferentes plotwtists me estresaban y emocionaban de igual manera. Por otro lado, el final del enemigo es meh, un poco insatisfactorio, para que nos vamos a mentir. Aunque lo compensa el epílogo. |