El chico de la última fila

Dicen que los polos opuestos se atraen y en este caso se confirma al cien por cien, porque Dylan y Hugo no pueden ser más distintos. Hugo es un tipo centrado, tranquilo, con las cosas muy claras, y lo que menos se imagina es verse inmerso dentro de un huracán llamado Dylan.

Dylan irrumpe en la vida de Hugo y de los Cabana, como elefante en cacharrería con su carácter extrovertido, hablador, sin ningún filtro a la hora de decir las cosas, y con un gran sentido del humor, lo que contrasta también con la gran sensibilidad que tiene hacia la música. Pero no es oro todo o que reluce, y es que Dylan tiene sus propios demonios. Una infancia robada y una gran pérdida han hecho que se escude bajo esa actitud desinhibida y despreocupada.

Hugo y Dylan se conocen tras el concierto que Dylan da en Madrid, y el encuentro no puede ser más desafortunado. Sin embargo, Dylan decide recorrer más de 400 km con su moto para plantarse en la puerta de la casa de Hugo, y aquí es donde comienza una amistad que irá fraguándose y transformándose en atracción, deseo y finalmente amor. Y es que Dylan se irá haciendo un hueco en la vida de los Cabana y en el corazón de Hugo pero por otro lado, Hugo hará que poco a poco Dylan abra esa caja de Pandora en la que se encuentran todos sus demonios.

Nuevamente, Susanna nos va intercalando capítulos del presente con el pasado, y además deja entrever algunos sucesos del primer libro de la serie, y está tan bien hilado todo que la historia fluye por sí sola, sin dejar ningún cabo suelto.

Este libro al igual que el resto de libros de la serie Cabana pueden leerse de manera independiente ya que todos tienen su historia autoconclusiva, pero recomiendo leer el anterior ya que se hacen varias referencias a situaciones que ocurren en el primer libro. Además, un detalle que me ha gustado de este libro es que tiene dos epílogos. Un primer epílogo propio de la historia, y un segundo que complementa al epílogo de la primera novela de la serie, lo que a mí me ha parecido muy original y acertado.

Sinceramente, Susanna me sorprendió con la historia de Alex y Priscila, pero con Hugo y Dylan me ha enganchado definitivamente a los Cabana de tal manera que ya estoy con el siguiente libro, y por lo que llevo leído …… promete, promete mucho.

De verdad pienso que Susanna se está abriendo un hueco en este difícil mundo y que ha venido pisando fuerte para quedarse.
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